El diestro Luis Miguel Encabo, en estado muy grave tras una cornada en Alcalá

Encabo se encontraba toreando al quinto de la tarde, de la ganadería de Baltasar Ibán, cuando en un remate de una serie por la derecha, el toro le pisó la muleta y al intentar girarse para recogerla perdió la cara al animal, que se arrancó y prendió al torero de muy feas maneras.

Aún así el diestro madrileño hizo por levantarse e incluso llegó a tirarse a matar una primera vez, pero tras el pinchazo Encabo se desvaneció en el ruedo y fue recogido por las asistencias, que le condujeron rápidamente a la enfermería, donde fue operado con carácter de urgencia.

El parte médico firmado por el cirujano de la plaza, el doctor Enrique Crespo Rubio, señala que Encabo sufre «una herida por asta de toro en el tercio medio de muslo izquierdo con orificio de entrada de cinco centímetros que presenta tres trayectorias ascendentes: una hacia fuera de quince centímetros que contunde y diseca arteria, vena y nervio femoral en unos cinco centímetros, arrancando colaterales venosos; otra hacia la región crural de unos veinticinco centímetros que parte y desgarra el abductor mayor; y una última hacia adentro de unos trece centímetros, que a través de abductor medio llega a la cara posterior interna. Shock traumático. Pronóstico muy grave».

Tras la intervención fue trasladado en UVI móvil al Hospital Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, donde ha quedado ingresado.