Arranca una nueva temporada con los mismo favoritos de siempre

Una vez más, esta Liga parece que será cosas de dos. Barcelona y Real Madrid disputarán su enésimo enfrentamiento para aclarar quién ostenta la supremacía en el fútbol español. Y los dos acuden a la primera jornada con dudas todavía por resolver. Los blancos rezuman dos sentimientos contradictorios. Por una parte, vieron en el partido de vuelta de la Supercopa que su equipo no ha perdido la pegada ni el espíritu combativo; por el otro lado, dudan de que esta fórmula sea la más adecuada para conseguir el tercer título liguero consecutivo.

El coraje sirvió en el último tramo de la era Capello para que el italiano sumará su segundo campeonato con el Madrid con una remontada espectacular ante el eterno rival. Con Schuster, la pronta eliminación de la Liga de Campeones y las carencias del rival hicieron que la Liga fuera un paseo. Pero, ahora el aficionado blanco ve que el equipo ha perdido pegada.

En el otro lado del puente aéreo, el Barcelona ha creado un nuevo proyecto alrededor de Josep Guardiola. Después de cinco años de Rijkkard, el ex cerebro del Dream Team ha llegado con un nuevo manual para poner en cintura a la primera plantilla culé. Y el experimento ha gustado al aficionado. El Barça ha traído jugadores de clase media alta (Keita, Hleb, Cáceres), ha recuperado a jóvenes canteranos (Piqué) y se ha gastado los euros en una estrella (Alves).

Segundo plano

El resto de los equipos tendrán que demostrar que son una opción con garantías para los dos grandes. El Villarreal y el Atlético de Madrid afrontarán los dos primeros meses de competición como un verdadero campo de pruebas. Deberán demostrarse que tienen recursos suficientes para encarar tres competiciones de máximo nivel. Por su parte, Sevilla y el Valencia también lucharán por entrar en la Champions. Manolo Jiménez tendrá la misión de acoplar a las nuevas fichas (Acosta, Duscher, Romaric, Konko ) para cubrir el agujero creado en el centro del campo con las marchas de Keita (Barça) y Poulsen (Juventus). Unai Emery, al igual que su homólogo sevillano, tiene la obligación de devolver la tranquilidad a una entidad convulsa e intentar luchar por algún título. Lo intentará, al menos, con David Villa.

Después de completar la mejor temporada de su historia, el Racing de Santander intentará evitar el mal de los equipos pequeños cuando suben muy alto. La temporada después del éxito, les cuesta un mundo mantener el tipo en todas las competiciones. Ya la gran perjudicada suele ser la Liga, ya que jugar en Europa es toda una ilusión. A ese reto se enfrentan los cántabros, con el novato Juan Ramón López Muñiz en el banquillo.

Almería y Mallorca viven situaciones similares. Han vivido sendas revoluciones en las plantillas y ahora esperan que tanto cambio no se traduzca en malos resultados. El Athletic apuesta por realizar una temporada que le permita mantenerse en la zona media de la tabla y evitar los agobios y sustos de las últimas jornadas.

Por abajo, la lucha directa por eludir el descenso se presenta muy igualada con varios candidatos como Valladolid, Osasuna o Recreativo. Tendrán como compañeros de viaje a los recién ascendidos Numancia, Málaga y Sporting de Gijón.