PUNTO NEGRO. Un camión pasa por el lugar del siniestro del pasado domingo. / FRANCIS JIMÉNEZ
Ciudadanos

Tráfico admite que la curva del accidente de Vejer «seguirá siendo conflictiva»

La DGT afirma que mientras no finalice la construcción de la A-48 el peligro seguirá ya que el paso de autovía a carretera coge por sorpresa a los conductores

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El kilómetro 36,5 de la N-340, donde perdieron la vida cuatro jóvenes de Algeciras el pasado fin de semana es ya un viejo conocido de Tráfico. Cada año se repite en el listado de puntos negros que elabora la DGT y parece que seguirá condenado a ser una zona de alta siniestralidad por las dificultades que conlleva hasta que no completen el resto de tramos de la Autovía de la Luz (A-48), que terminará con el desdoble de la N-340.

El enclave tiene características especiales por la situación en la que se encuentra, justo después de finalizar el último tramo de la autovía y en medio de una curva muy cerrada donde la limitación de velocidad es a 60. Usuarios de la carretera ya manifestaron a LA VOZ sus críticas por la falta de señalización de la zona, pero la Dirección Provincial de Tráfico asegura no haber detectado esa carencia de señales, según indicó ayer el jefe de la DGT en Cádiz, Luis Javier Herrero.

Aún así, la oficina gaditana está realizando un estudio sobre la N-340, que hace hincapié en los puntos negros registrados en 2007. En total fueron siete y todos localizados a partir del tramo que une Vejer con Algeciras, el más utilizado por los usuarios, que entran directamente en la carretera nacional desde la autovía.

Mejoras de la zona

Sin duda el accidente del pasado domingo eleva a los primeros puestos de peligrosidad el punto kilométrico 36,5 que hasta ahora obstentaba el kilómetro 90, que se encuentra justo antes de llegar a San Roque. Es precisamente en esa zona donde se empezaron a instalar radares, uno de los sistemas «más efectivos que utiliza el Ministerio del Interior para controlar la velocidad», tal como han reconocido sus responsables.

Este informe «arrojará luz sobre la situación de la vía, aunque no es el primero que hemos realizado», reconoció el máximo responsable de Tráfico en la provincia. En este sentido, Herrero mostró su disponibilidad a realizar mejoras para reducir la siniestralidad en la medida de lo posible. «Si se considera necesario ampliar la señalización o instalar determinados dispositivos lo llevaremos a cabo», recalcó.

Con todo, Luis Javier Herrero admitió que los primeros kilómetros de la N-340 a partir de Vejer «seguirán siendo conflictivos hasta que se termine la construcción de la A-48». La entrada directa a una carretera nacional desde la autovía coge por sorpresa al conductor, que llega a elevada velocidad, ésta suele ser la causa más probable de accidente en la zona. No obstante, el jefe provincial de Tráfico confía en que Fomento no dilate el proyecto e inicie los trabajos de desdoblamiento de la N-340 cuanto antes, sobre todo en la zona de la Barca de Vejer, donde se produjo el desgraciado siniestro. De la misma forma, recomendó prudencia a los conductores y estar atentos a las señales en las zonas de peligrosidad.

La N-340 es sólo un ejemplo de la situación de las carreteras gaditanas. En total la provincia acumula 58 puntos negros, diez de ellos se encuentra en la autovía que une Algeciras y Málaga.

emartos@lavozdigital.es