'906'
Todos los informativos de las distintas cadenas se han hecho eco de la estafa telefónica: Usted recibía en su móvil un SMS que le decía que alguien quería ponerse en contacto. Para saber quién era tenía que llamar a un número que empieza por 906 (de esos que por cada segundo le cobran un ojo de la cara), que a su vez le remitía a otro 906. Sin embargo, estos números son muy populares en televisión. Hace años, las cadenas locales, iniciaron una serie de concursos telefónicos en los que se tenía que responder a una pregunta tonta o averiguar una cuestión chorra que se mostraba en un panel. A cambio, uno se llevaba un dinerito que nunca viene mal.
Actualizado: GuardarClaro que por llamar era usted el que pagaba y el truco estaba en mantenerle interminables minutos a la espera, en el que la caja de los canales iba aumentando, para, al final, siempre otro más listo, se le adelantaba en la respuesta.
Como es una manera fácil de incrementar las cuentas de resultados, las cadenas nacionales (de momento todas las privadas, pero no faltará mucho para que lo hagan también las públicas), se apuntaron al invento. En principio con nocturnidad y de tapadillo porque esta forma de sacar dinero a sus espectadores les debía sonrojar bastante. Surgieron programas como Supernova (Antena 3), Marca y gana (Cuatro), Aquí se gana (Telecinco) o Ganas de ganar (La Sexta) que, en impresentables horarios de madrugada, encendían las luces de los platós, reclamaban a presentadores y presentadoras de segunda división con ganas de ascender y ponían a trabajar a todas sus telefonistas. ¿Qué insólito espectáculo el ver a estas cadenas compitiendo con concursos impresentables para sacarles los cuartos a los adormilados espectadores!
Pero como todo lo que es susceptible de empeorar, empeora, ahora también, y ya sin la menor vergüenza, estos concursos con pizarra y panel se han reproducido por las mañanas. Suerte por la mañana o Despierta y gana buscan que, además de noctámbulos e insomnes, sean también las amas de casa quienes, antes de irse a la compra, ayuden a financiar a la cadena. Las cadenas informan de estafadores telefónicos en sus informativos, pero a la vez hacen caja.