Georgia declara el «estado de guerra»
Putin visita por sorpresa a los refugiados en Osetia del Norte y exige a Georgia que «termine con su agresión»
TIFLIS/MOSCÚ Actualizado: GuardarLos bombardeos en Osetia del Sur continúan en medio de un escenario internacional complicado que despierta a los viejos fantasmas de la Guerra Fría. En el seno de la ONU la falta de acuerdo para exigir el fin de los ataques pone de manifiesto la difícil situación de un pueblo que huye hacia los países vecinos lamentando centenares de muertos civiles. El territorio donde más se están desplazando es Osetia del Norte, donde ha viajado por sorpresa el primer ministro ruso, Valdimir Putin, y ha exigido al Gobierno georgiano que "termine con su agresión".
Esta mañana, el Parlamento georgiano ha aprobado el decreto por el que se declara el "estado de guerra" en el país durante los próximos quince días. El presidente georgiano, Mijail Saakashvili, había anunciado previamente que iba a declarar la Ley Marcial en el país para proteger a la población ante la escalada militar en la región secesionista de Osetia del Sur, atacada por Georgia, que ha motivado la intervención militar de Rusia.
Un fantasma de la Guerra Fría
La entrada en escena de Rusia va más allá porque el viejo rival, Estados Unidos, también se ha pronunciado. Desde Pekín, donde asiste a los primeros compases de los Juegos Olímpicos, el presidente estadounidense George W. Bush, "profundamente preocupado", ha pedido que precisamente Rusia se sume a los esfuerzos para que el conflicto "pueda resolverse pacíficamente". Además, Bush recuerda que Georgia es un país soberano, "cuya integridad territorial debe ser respetada".
Dimitri Medvédev, su homólogo ruso, le responde sin embargo que la única salida a la crisis es que Georgia se retire de Osetia del Sur. De hecho, ha hablado telefónicamente con Bush, según ha difundido el Kremlin, y le ha informado sobre los "miles de muertos y decenas de miles los refugiados" a causa de los bombardeos indiscriminados de la artillería y la aviación georgiana. Así que a Rusia no le ha quedado más remedio que emprender "la defensa de la población civil".
Sin embargo, fuentes oficiales estadounidenses han calificado como "desproporcionada" la respuesta de Rusia: "La respuesta de Rusia ha sido desproporcionada, en relación a cualquiera que fuera la amenaza que (Moscú) estaba denunciando", ha declarado el funcionario estadounidenses, que ha insistido en que se proclame "un inmediato alto el fuego y el cese de las hostilidades entre todas las tropas".
Putin exige el cese de la agresión contra Osetia del Sur
Todo ello se produce en medio de los combates y las acusaciones que se intercambian Georgia y Rusia sobre su responsabilidad en el conflicto. Así, el primer ministro de Rusia, Vladímir Putin, ha instado a Georgia al "cese inmediato de la agresión contra Osetia del Sur" y las "violaciones de los acuerdos anteriores de paz y alto el fuego", desde la vecina región rusa de Osetia del Norte. Al territorio ruso viajó por sorpresa para coordinar la ayuda humanitaria a los refugiados donde ha calificado "las acciones de las autoridades georgianas" como "un crimen y, ante todo, un crimen contra su propio pueblo".
En medio de la confusión reinante, el líder de Georgia, Mijaíl Saakashvili, ha propuesto el cese inmediato de las hostilidades en Osetia del Sur e iniciar el proceso de desmilitarización de esa región, aunque Rusia ha hecho oídos sordos a esa iniciativa y su presidente, Dmitri Medvédev, hablaba de combates directos de sus tropas con las unidades gubernamentales georgianas para "imponerles la paz".
Medvédev, además, ha informado a Bush sobre las "salvajes" acciones de Georgia contra la población suroseta y las tropas de paz rusas y ha cifrado en "miles los muertos y en decenas de miles los refugiados" a causa de los bombardeos indiscriminados de la artillería y la aviación georgiana.