Un accidente de tráfico en Toledo se cobra la vida de cinco miembros de una misma familia

Seis personas han muerto, entre ellas dos menores, en un accidente de tráfico ocurrido en la provincia de Toledo, entre las localidades de Polán y Gálvez, en el que se han visto implicados dos vehículos. Cinco de los fallecidos pertenecen a la misma familia. En un principio el siniestro había dejado una única superviviente, una niña de 9 años, que viajaba sin cinturon de seguridad y que salió despedida del vehículo. Sin embargo, poco después de ser ingresada en el hospital Virgen de la Salud de Toledo ha muerto.

El accidente, que tuvo lugar a las 10.10 horas en el kilómetro 25,00 de la carretera CM-401, se produjo al chocar frontalmente dos turismos, un Citröen C-4 y un Seat Ibiza. En el primer coche viajaba sólo una persona mientras que en el segundo iban los otros cinco fallecidos: dos menores de edad y su madre, que residía en la localidad de Gálvez desde hacía diez años, así como la madre de ésta y su hermana, que vivían en Getafe. Desde el municipio madrileño se desplazaban para pasar unos días en la localidad toledana.

El Pleno extraordinario del Ayuntamiento de Gálvez, reunido tras el accidente, ha decretado un día de luto oficial con las banderas a media asta y ha decidido que mañana los representantes del Consistorio asistirán al funeral para apoyar a las familias.

El alcalde de Gálvez, testigo del siniestro

El alcalde de Gálvez, Manuel Fernández Lázaro-Carrasco (PP), se dirigía a su pueblo con sus dos hijos y ha sido prácticamente testigo del siniestro: "Había mucho humo en la carretera y al principio pensé que se trataba de un tractor, pero luego vi lo ocurrido y me quedé impresionado".

El regidor, que iba detrás de los vehículos accidentados, ha explicado que una de las mujeres fallecidas, de nombre Marimar, y madre de los dos niños que iban en el vehículo, había trabajado en el Ayuntamiento y ahora lo hacía en el tanatorio local. Fernández llegó al lugar del accidente minutos después de producirse, llevó a sus hijos a Gálvez y retornó al mismo punto para seguir de cerca las labores de rescate de las víctimas atrapadas en el amasijo de hierros en que quedaron convertidos los dos vehículos.

Un adelantamiento indebido

Los agentes que analizan las causas del accidente barajan como una de sus principales hipótesis la del adelantamiento antirreglamentario y también la distracción. Según las pesquisas iniciales, se pudo producir por una conjunción de elementos, ya que uno de los dos vehículos implicados invadió el carril izquierdo de forma antirreglamentaria, pero lo hizo en una recta donde hay bastante visibilidad. Por ello, los agentes sostienen también que el conductor se hubiera distraído al adelantar.