Cuando la economía y los resultados fallan...
De más a menos. Todo pintaba bien por la mañana: el Ibex-35 llegó a acariciar los 11.900 puntos pero, a medida que se fueron publicando malos datos macroeconómicos y empresariales, las ganancias se fueron desinflando hasta desaparecer. De hecho, el selectivo español llegó al final de la jornada con un descenso del 0,48% y dio un último cambio en los 11.717,50 puntos.
Actualizado:El BCE, de acuerdo con lo previsto, mantuvo el precio del dinero en el 4,25%. Aunque el presidente de esta institución, Jean-Claude Trichet, advirtió de que su principal objetivo sigue siendo la lucha contra la inflación, el mercado interpretó que no habrá subidas de tipos a corto plazo, debido a la debilidad económica, a la que también aludió Trichet. Este segundo mensaje no gustó demasiado.
Hubo otros factores que tuvieron incidencia en los mercados. En lo económico, la peor noticia vino de EE.UU., de la mano de unas cifras de empleo peores de lo previsto y que no compensó un buen dato inmobiliario. Y sigue el deterioro de las cuentas, como demostraron AIG, Wal Mart, Aegon, Axa, Allianz y Deutsche Telekom. Para colmo de males, el petróleo volvió a repuntar, lo que explica que Iberia fuera el peor valor de la sesión con un descenso del 3,77%.
El sector triunfador fue el eléctrico, gracias a un informe positivo publicado por Goldman Sachs. El banco de inversión americano también impulsó a Acciona, valor que incorporó a su lista de favoritos. A Ferrovial lo que le animó fue la reestructuración de la deuda de BAA.