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La más controvertida de las declaraciones, por los detalles que aportó de su relación con el supuesto ideólogo del secuestro, la realizó José Antonio Giles Rodríguez. Este joven sevillano de 24 años fue apresado en la madrugada del 18 de junio cuando la Policía asaltó la finca de Almonte. Su cometido era vigilar al empresario durante su cautiverio y no lo negó ayer. Giles Rodríguez explicó que fue 'contratado' por el estafador para hacer ese trabajo y a cambio recibiría droga. Se declaró adicto a la cocaína y a la heroína y se refugió en esa enfermedad para tratar de justificar su participación en el secuestro de mayor duración ocurrido en España. Sobre su relación con Rodríguez Pueyo, situó su origen cuando el pub Arny aún no se había convertido en sinónimo de escándalo. Y desde entonces mantuvo el contacto con él porque éste requería sus servicios sexuales a cambio de dinero. De esta manera, el joven sevillano desveló una de las relaciones encubierta que existen en este caso.
Actualizado: GuardarCuando Rodríguez Pueyo le reclutó, el carcelario puso una única condición, según su declaración, que la víctima no fuera torturada. Precisamente uno de los delitos que le imputan es el trato degradante que infligió al empresario y que fue uno de los detalles que más sorprendieron a los agentes que lo liberaron. José Antonio Giles asegura que desde que asumió su trabajo mejoraron las condiciones en cautividad del secuestrado.