Tragedia evitable
Actualizado:a tragedia sacudió ayer India tras la muerte de más de un centenar de peregrinos en el santuario hindú de Naina Devi, abarrotado de fieles que se disponían a celebrar una popular festividad que se prolonga durante diez días. Un rumor fatal sobre un supuesto desprendimiento de rocas motivó una estampida que quizá podría haberse evitado con unas medidas de seguridad menos primitivas que las que suelen contar los templos del país, convertidos en una trampa potencial para los miles de ciudadanos que expresan su devoción en ellos. La reiteración de los accidentes y la envergadura de este nuevo drama deberían propiciar una reflexión de las autoridades locales sobre la insuficiente protección con que cuentan los lugares de peregrinación masiva. Aunque lo urgente ahora es tratar de evitar que el infortunio se vea agravado por nuevos fallecimientos.