Un grupo de «cuatro jubilados»

sí se definen ellos mismos. Y lo hacen orgullosos, puesto que estos hombres -ciertamente la mayoría si no todos son jubilados- han conseguido un hito en la política local, y es que un juez impute al mismo tiempo a los tres últimos alcaldes de la ciudad: Pedro Pacheco, María José García-Pelayo y Pilar Sánchez. Los que fueran arrendatarios de los huertos de ocio siempre han pensado que se cometió una injusticia y una ilegalidad con ellos al desalojarlos por la fuerza de aquellas parcelas y expropiarselas para dedicarlas a la construcción de viviendas. Su confianza en sus tésis les hizo iniciar un largo camino judicial que aún no ha concluído pero que ya ha dado sus primeros frutos gracias a la sentencia del Contencioso. El colectivo advierte: «No pararemos hasta que los responsables de estos desmanes urbanísticos paguen ante la Justicia lo que hicieron». En estos días están realmente felices.