La formación de los futuros empleados de Aeroblade comenzará en septiembre
La fabricante de palas eólicas creará cerca de 500 puestos de trabajo, de los que más de 200 serán para el colectivo de afectados por el cierre de Delphi La factoría se instalará próximamente en el polígono de Río San Pedro
Actualizado: GuardarEl alcalde de Puerto Real, José Antonio Barroso, recibió ayer la visita de los responsables del proyecto industrial Aeroblade, la empresa de palas eólicas anunciada por la Junta y que próximamente se instalará en el polígono industrial de Río San Pedro, aunque en un principio se barajó la posibilidad de que ocupara los terrenos anexos a Delphi, en la que finalmente se instalará la fabricante de todoterrenos Zahav Motor. El director de relaciones institucionales de la compañía aeronáutica del grupo Synergy Aernnova, Jon Larrinaga, y de Marco Antonio Jiménez, de Orisol, división de renovables de la misma corporación, informaron de que su centro de producción ocupará una superficie de 52.650 metros cuadrados, con una reserva de suelo de otros 150.000.
La ubicación de la fábrica junto al muelle de La Cabezuela ha sido determinante para la elección de Puerto Real por la facilidad que supone para la logística y la distribución del producto. La producción anual será de 1.200 palas, la inversión gira en torno a 43 millones de euros y se crearán 473 puestos de trabajo.
Ante esta perspectiva, Barroso señaló a este periódico que ha ofrecido «la colaboración del municipio tanto para los trámites que ante el Ayuntamiento deben formular, en concepto de licencias y permisos de obra, como para el proceso de formación que los futuros trabajadores de Aeroblade tendrán que realizar». Según explicaron los responsables del proyecto, el periodo de formación podría comenzar al finalizar el verano, para que la capacitación de los trabajadores corra de forma paralela a la construcción de las instalaciones, de modo que durante 2009 de comienzo la producción. Los directivos recordaron el compromiso adquirido con la Junta de contar con más de 200 afectados por el cierre de Delphi como futuros empleados de la empresa. Por su parte, Barroso se mostró ilusionado por la implantación de esta empresa. «Esperemos que las promesas de reindustrialización en la Bahía de Cádiz se vayan materializando con proyectos concretos como el Aeroblade», señaló el alcalde.