Rubalcaba avisa a los terroristas de que la cárcel está más cerca
Alfredo Pérez Rubalcaba avisó ayer a los terroristas de que no escaparán a la actuación de las Fuerzas de Seguridad del Estado. El ministro del Interior, que participó en un acto de imposición de medallas en Cádiz, respondió con premura a la oleada de atentados perpetrados por la organización criminal en las playas cántabras y lanzó un recado contundente a quienes simpatizan con la banda. «La mejor forma de asegurarse una larga estancia en la cárcel -advirtió- es ingresar en ETA».
Actualizado: GuardarPérez Rubalcaba mantuvo informado durante toda la jornada a José Luis Rodríguez Zapatero que, inmerso en un acto de partido en Barcelona, rehusó pronunciarse sobre la última actuación de los etarras. Fue él quien puso voz a la respuesta del Gobierno y quien recordó que, al final, el sistema democrático siempre gana la partida a los terroristas. «Con una particularidad -añadió- que cada vez pasa un período de tiempo menor desde que se ingresa en la banda ETA hasta que se llega a cárcel». Un dato que sirve al Ejecutivo para medir la fuerza de la agrupación.
El presidente del PP, Mariano Rajoy, también se mostró satisfecho con la actuación policial y alabó la «agilidad» con la que se obró en las zonas afectadas para evitar daños personales. En una comida-mitin en Vigo, donde clausuró los cursos de verano de su partido, garantizó su respaldo al Ejecutivo en la lucha antiterrorista siempre que, como ahora, busque la derrota de la banda «con todos los instrumentos del Estado de Derecho» y reclamó una reforma de la legislación para lograr mayor eficacia.
El Gobierno vasco se refirió de forma exclusiva a ETA, a la que restó la más mínima legitimidad. En un comunicado advirtió de que «jamás» aceptará que se pretenda «defender idea alguna amenazando, extorsionando, asesinando o sembrando el terror con bombas».
El presidente cántabro, Miguel Ángel Revilla, defendió sin embargo que lo ocurrido debe servir como «toque de atención» para el 'lehendakari'. Desde Sevilla, adonde acudió para asistir a la botadura de un buque, acusó a su homólogo vasco de dar «cobertura» ideológica a la banda con sus «aventuras ilegales». Y pidió que deje de lado su proyecto soberanista para dar prioridad a la política contraterrorista.
