La pija le gana a la pandillera

Aunque pueda parecer extraño, ahora, también un asunto de muñecas puede terminar en juicio. Así ha ocurrido con Matell, la fabricante de las Barbie que denunció a las de la Bratz por copiar el diseño de la muñeca. Un jurado federal de California dio ayer su veredicto y afirmó que el diseño de las Bratz de la empresa MGA salió de los talleres de su rival Mattel, fabricante de las Barbie. La decisión de los diez miembros del jurado federal convocado en la localidad de Riverside abre la puerta a un nuevo pleito por parte de Mattel contra MGA Entertainment Inc., en que Mattel previsiblemente reclamará indemnizaciones.

Matell cifra en 500 millones de dólares (315 millones de euros) al año las ganancias que han aportado a MGA las Bratz, que salieron al mercado en 2001, pero según el diario Los Ángeles Times algunos analistas valoran las ganancias anuales en hasta 2.000 millones de dólares (1.200 millones de euros). Las Bratz, con sólo siete años, pretenden ser más sofisticadas y sexys que las Barbie, que se acercan a su 50 cumpleaños casi sin cambios en su imagen de niñas buenas y figura muy estilizada.

El argumento de Mattel, aceptado por el jurado, era que el diseñador de las Bratz, Carter Bryant, ideó las nuevas muñecas en 1999, cuando estaba en la plantilla de Mattel y antes de ser fichado por MGA.

Por su parte, MGA afirmó que el diseño de las Bratz fue elaborado por Carter en el segundo semestre de 1998, precisamente en un período en que no estaba en la plantilla de Mattel. En la segunda fase del juicio, que comenzará la semana próxima, Mattel podría limitarse a reclamar indemnizaciones por las ventas ya habidas y derechos de autor sobre las venideras, aunque podría ir más lejos y pedir una orden judicial para que dejen de fabricar las Bratz.