El congreso de la corbata
José Blanco y Manuel Chaves calientan los ánimos de los delegados socialistas con sarcásticos reproches a Rajoy
Actualizado: GuardarPoco podían imaginar los jinetes croatas que introdujeron la corbata en la Francia del siglo XVII que su prenda sería motivo de debate en el 37 Congreso del PSOE. La asamblea, en su primera jornada, se caracterizó por una cansina calma chicha, clima muy distinto al de aquellos congresos socialistas de antaño, en los que el cuchillo entre los dientes y la zancadilla presta eran moneda corriente.
Tras el affaire entre José Bono y el ministro de Industria en torno a la corbata, la gran mayoría de los compromisarios emuló a Miguel Sebastián y acudió al congreso socialista con el cuello despejado. Sólo los muy institucionales José Luis Rodríguez Zapatero, Alfredo Pérez Rubalcaba, José Montilla y Álvaro Cuesta se presentaron con traje y corbata.
Juan Fernando López Aguilar extrajo consecuencias ideológicas del debate: «La izquierda tiene la responsabilidad de liderar los cambios». Jesús Caldera, sociales: «No llevar corbata da un ambiente más igualitario en las relaciones laborales». Los discursos del secretario de Organización y del presidente del PSOE se ajustaron en cambio más a los cánones, y enardecieron a la militancia a base de dar estopa al PP. José Blanco señaló que el problema del líder opositor raya en la esquizofrenia pues «no se sabe si Mariano piensa lo mismo que Rajoy». «Mariano lo tiene muy difícil porque tiene que cambiar de política sin que se entere Rajoy», insistió Blanco.
El secretario de Organización no mostró ninguna fe en Rajoy porque «aunque de vez en cuando vaya de visita al centro, siempre deja abierto el camino del regreso al monte». Grandes aplausos y carcajadas. El listón estaba alto, pero Manuel Chaves puso de su parte en su discurso de bienvenida. Comenzó con un conciliador «vamos a esperar y ver» qué derroteros toma el PP, pero acto seguido desconfió de que haya escogido una nueva línea política porque éste es «el enésimo viaje al centro» de los populares, que «llevan anunciando» ese giro «desde que se fundó» el partido.