La clave, en Toxicología

a Fiscalía está pendiente de los resultados que envíe el Instituto de Toxicología para impulsar la revisión de la condena de Ricardi o rechazarla por completo. Pese a las críticas que está recibiendo ante una posible inoperancia, el Ministerio Público sigue manteniendo la misma línea de prudencia y cautela, ya que las diligencias practicadas hasta ahora no descartan la culpabilidad del portuense. La Policía rebatió la principal prueba que existe contra el preso -la identificación que hizo su víctima- apelando a una confusión: Ricardi y Fernando P. G. miden lo mismo y tienen ambos un defecto en los ojos. Sin embargo, entre ambos hay una diferencia de 16 centímetros de altura, como ya adelantó LA VOZ, y Fernando no tiene anomalías en los ojos.