Entre paredes del XVIII
Actualizado:n la calle Caballeros se encuentra situado el bar restaurante La Trocha, que desde hace unos dos años los jerezanos pueden disfrutar de sus platos estrella como chuletillas de cordero o las brochetas de langostinos con bacon y pollo al Pedro Ximénez con piñones y pasas. Su propietario, Javier Ceballos, asegura que los trabajos de adaptación del local «fueron muy importantes porque estaba casi abandonado», pero han conseguido desenterrar las antiguas paredes del siglo XVIII y pulir las columnas de hierro forjado de principios del siglo XX. Trocha cuenta con una decoración minimalista, sin estridencias y muy original. Este bar se divide en dos salones independientes: uno para el restaurante donde el comensal puede saborear platos como la zarzuela de pescado y marisco con chocolate; y otro, el bar.