Medio siglo chupando
El invento español con más proyección internacional cumple 50 años con 18 millones de unidades diarias en el mercado
Actualizado: GuardarNació hace cincuenta años como una ingeniosa y práctica solución para evitar que los peques se pringaran las manitas de caramelo. Medio siglo después, el Chupa-Chups (chupachús para sus adeptos españoles) se ha convertido en un fenómeno global. Un éxito empresarial y comercial que ha sabido imponer su magistral sencillez y sobrevivir en medio de la sofisticación y la tecnificación de las golosinas. Su creador, Enric Bernat, inventó en 1958 el archifamoso caramelo del palito, del que cada día salen al mercado mundial 18 millones de unidades en casi 160 países. El primer fabricante del universal caramelo del palito fue Granja Asturias S.A. Desde 2006, la marca es propiedad de una multinacional italo-holandesa que lo se fabrica en más de 127 sabores. Para algunos el Chupa-Chups es, junto a la fregona, el gran invento español del siglo XX. La sencillez es el secreto de su éxito, desde que nació como un caramelo moderno e inovador, hasta que su consolidación como un icono pop del siglo XX que denomina a todos los caramelos de las mismas características. La marca se ha comercializado en más de 150 países y su fórmula de expansión se estudia en escuelas de negocios y marketing. Ha sido el primer caramelo en viajar el espacio y, si se colocaran uno tras otro todos los Chupa - Chups producidos en estas cinco décadas, habría suficientes para dar la vuelta a la tierra casi 20 veces.
Un palo y una bola
Algo tan simple como incorporar un palo a una bola de caramelo fue crucial para que las madres no se negaran a comprar dulces a sus hijos. El secreto de su éxito se debe a la visión comercial de su creador, Enric Bernat Fontlladosa (1923-2003) que pretendió, desde el principio de su negocio, crear un imperio de las dimensiones de Coca-Cola. Sin llegar a tanto, el caramelo del palito ha hecho historia por ser la primera golosina que ha orbitado en el espacio, dado que en 1995 fue degustado por los astronautas de la estación MIR. A su fama mundial han contribuido actores, deportistas, políticos, cantantes, modelos y astronautas: personajes de ficción como el detective Kojak (Telly Savalas), y reales como Johan Cruyff, Rivaldo, Madonna, Harrison Ford, Giorgio Armani, Mariah Carey o las Spice Girls, que aparecieron en público disfrutando de sus múltiples sabores.
Su consumo, que dura una media de 10 minutos, se ha relacionado con una estética determinada, con una manera de combatir la ansiedad, las ganas de de fumar o evitar picar entre horas.