M&P, una empresa dedicada a los contratos de extranjeros en origen
El gaditano Carlos Martel gestiona con Chile y Perú la captación de trabajadores en puestos medios que no se cubren en España
Actualizado: GuardarA Carlos Martel (nacido en Jerez) las fronteras le han servido para derribar distancias. Ha trabajado en España, Irlanda, Francia y Chile; ha viajado por toda Suramérica y guarda contactos con prácticamente todos los países del cono sur. De aquella experiencia aprendió las fortalezas de cada país en materia laboral. Dónde había buenos carpinteros; dónde mecánicos; dónde enfermeros.
Y los había a cientos. Con el mismo idioma que se habla a este lado del Atlántico, con una educación fácilmente homologable, con la ambición suficiente para dejar atrás su país de origen, en busca de un mejor futuro profesional.
Todas estas ventajas se le grabaron en la mente y, al regresar a España tras vivir un decenio en Chile, se encontró con las debilidades de este mundo laboral. La brecha entre los titulados superiores y los puestos sin cualificación apenas era cubierta por la formación profesional. Faltaban carpinteros, mecánicos, enfermeros... Exactamente lo mismo que sobraban en el continente americano. ¿Por qué no acercar y ajustar ambas realidades? «Nos dedicamos sólo a mandos medios: ni peones ni directivos; y siempre en sectores para los que nunca se encuentra un empleado aquí», resume este empresario.
Así nació M&P Internacional SL, una empresa dedicada a la contratación en origen que ya ha tramitado más de un centenar de empleos a inmigrantes chilenos y peruanos (los dos países de actuación con los que de momento trabaja Martel y para los que no se aplica la restricción que el Ministerio de Trabajo aplica a los contingentes de trabajadores extranjeros). Tiene oficinas en Madrid, Santiago de Chile y Lima. Las actividades más demandadas son la automoción o la sanidad. Los primeros que vendrán a la provincia (mecánico y carpintero) aterrizarán en Jerez en breve. Ninguno viene con un contrato inferior a un año.
«Cualquier contratación, incluso en un nivel local, es un riesgo muy elevado; imagine si se hace con miles de kilómetros de por medio: por eso es tan importante el servicio que ofrecemos a los empresarios», aclara Carlos Martel. De hecho, M&P (que significa Mapocho y Pezet, dos símbolos de Chile y Perú, respectivamente) ofrece desde la fe ciega en su proceso de selección («les ofrecemos lo que nosotros creemos lo mejor») hasta entrevistas personales con los candidatos por videoconferencia. Incluso el empresario puede viajar hasta el lugar de origen para hacer todo el proceso por sí mismo. «Cada uno elige lo que más le conviene, pero hasta ahora no tenemos quejas y sí muchas solicitudes de empresas de aquí», apunta el emprendedor gaditano.
El trayecto de más de 14.000 kilómetros entre Madrid y Santiago de Chile ya es para él una costumbre y se monta al avión como muchos se suben al autobús para ir al centro. Ahora, en estos tiempos de crisis, los contactos se multiplican. Como el proceso de selección es más o menos largo (se extiende como mínimo durante tres meses), M&P se ha encontrado con que lo que se necesitaba a principios de año ya no se puede afrontar. «Se están cancelando muchos casos, pero aún tenemos una cartera importante porque el nivel de satisfacción es alto», resalta Martel, pese a todo.