Razones para creer
Actualizado: GuardarE l partido frente a Italia fue tremendamente igualado. No podía ser de otra forma: resultó equilibrado en presión y en ocasiones, pero siempre con una tendencia superior para España, que no renunció nunca a sus señas de identidad, con su estilo de toque y posesiones largas hasta ir 'madurando' el encuentro a la espera de los últimos minutos, en los que ha logrado sus goles decisivos ante Suecia y Grecia. Esta vez no hubo acierto de cara al gol, quizá por falta de frescura, ya que hacía mucho calor en el estadio, y por lo firme que se mostró la defensa italiana, con un Buffon muy acertado y una gran acumulación de hombres en los repliegues-.
Tras la victoria ante Italia, queda confirmado que la selección se encuentra en una dinámica positiva de juego y resultados. Esa racha ha reforzado el estado de confianza del equipo y todo su entorno, y ha provocado que el guión previo no se salte ni ante Italia -Luis volvió a repetir 'once'-.
Casillas completó un partido muy sobrio. Sin tener mucho trabajo se mostró muy concentrado, lo que quedó patente con los remates de Camoranesi y Di Natale, y, sobre todo, en la tanda de penaltis. Así se logró que por primera vez en este campeonato España no encajara ningún gol. El portero se salió y los centrales Puyol y Marchena brillaron con su marcaje a Luca Toni, que sólo pudo rematar en contadísimas ocasiones. La solidez de ambos, siempre atentos para anticiparse, y la ayuda de Ramos, Capdevilla y Senna ayudaron mucho para mantener la puerta a cero.
El equipo no perdió el equilibrio anímico. A pesar de que los minutos pasaban sin llegar el gol, la selección no cayó en el desaliento, aun consciente de que Italia confiaba en su oficio forjado en los momentos críticos. La convicción de los jugadores españoles les hizo ser más constantes en su juego y aguantar muy bien la prórroga. Tanto, que generaron ocasiones hasta el final.
Estamos, por tanto, en una dinámica buena, pero no debemos ignorar a Rusia, que está en un estado físico tremendo. Los de Guus Hiddink lograron superar a una Holanda en racha, que había mostrado gran juego y que se creía superior al rival. España debe tomar nota.