Discriminación en serie
La televisión no escapa al sexismo. A ellas les tocan papeles de celosas y cenicientas, y a ellos, de autoridad
Actualizado:Celosas, sensibles, objetos sexuales, coquetas y cenicientas. Así es la imagen que se percibe de las mujeres que aparecen en las series de televisión, mientras que los protagonistas masculinos se antojan violentos y líderes. Esta es una de las conclusiones de un estudio del Instituto de la Mujer en el que se perciben elementos «sexistas, discriminatorios y estereotipados» en la pequeña pantalla. Ellas suelen interpretar papeles en los que dominan las relaciones personales y sentimentales, mientras que en las historias sobre cuestiones sociales y laborales tienen presencia más destacada ellos. Pero la ficción y la calle deben darse la mano porque la investigación destaca que los espectadores consideran estos contenidos próximos a la realidad.
Como en la vida real
«El estudio certifica una realidad que estamos percibiendo, el sexismo de la sociedad, que se trasmite en este caso a través de las teleseries, donde se repiten los clichés que no terminamos de romper», explica la directora de la entidad, Rosa María Peris, quien enfatiza sobre la influencia del medio a la hora de conformar la opinión pública, tal como consideran el 60% de los ciudadanos consultados, y su falta de compromiso por la igualdad, a pesar de su poder. «La televisión no va en esa dirección sino que reproduce situaciones discriminatorias, cuando es posible hacer entretenimiento y programas de calidad que reflejen unos valores igualitarios», mantiene.
Para llegar a estas conclusiones fueron encuestadas 1.600 personas (735 hombres y 865 mujeres). Además, se llevó a cabo un análisis paralelo a partir de entrevistas en profundidad a guionistas, expertos en el género, medios de comunicación y responsables de programaciones. El equipo visionó las series de más audiencia en la temporada 2006-2007: Ana y los siete, Aquí no hay quien viva, Hospital Central, Los Serrano, CSI Miami, El comisario, Yo soy Bea, House y Prison Break. A la hora de mencionar los títulos en los que se percibe más discriminación que en la vida real, las mujeres destacan Yo soy Bea, mientras que los hombres se inclinaron por Ana y los siete, que protagonizó Ana Obregón en TVE 1.
Por el contrario, Hospital Central se destaca entre los encuestados como la serie con más elementos igualitarios. El estudio subraya de forma general que existe un reforzamiento de las desigualdades entre hombres y mujeres a la hora de asignar las tramas. Las historias en la que priman los sentimientos, las relaciones personales y las sentimentales suelen estar protagonizadas por ellas, mientras que la presencia masculina tiene mayor protagonismo en tramas sociales y laborales. Sobre los modelos que se definen, el perfil de los hombres suele tener trazos más positivos, de «hombre infalible», mientras que la mujer «no puede ser perfecta en todo y si tiene éxito laboral es porque es demasiado ambiciosa».
Los estereotipos se detectan también en los roles de los personajes. Mientras ellos son líderes en los grupos en los que aparecen, ocupan puestos de mayor responsabilidad en sus trabajos y muestran más determinación en sus decisiones, las mujeres gobiernan más en el ámbito privado, en sus hogares, son menos independientes y suelen ocupar espacios secundarios. No se libran de estos prejuicios títulos de la repercusión de CSI, donde los forenses que mandan son hombres.