La familia del secuestrado sospechó que alguien del entorno estaba implicado
Sobre su hermano Rafael ha indicado que sigue descansando y que va evolucionando "bien"
Actualizado: GuardarJosé Manuel Ávila, el hermano del empresario de Sanlúcar liberado el miércoles por la Policía tras 16 días de secuestro, ha asegurado hoy que siempre sospecharon de que alguien del entorno, "aunque lejano", podría estar implicado en los hechos. En declaraciones a los periodistas a las puertas de la casa familiar 'Villa Rosa', Jose Manuel Ávila ha dicho que uno de los detenidos ha sido cliente suyo y le tenían un local alquilado y aunque conocen su identidad, ha apuntado que no podían facilitar más datos, puesto que se ha decretado el secreto de sumario.
"Siempre hemos sospechado de que podía haber alguien del entorno cerca implicado, no amigos ni familiares, de un entorno lejano, pero no nos ha sorprendido porque era lógico", ha subrayado. Sobre su hermano Rafael ha indicado que sigue descansando y que va evolucionando "bien". "Hoy ya es otro, y hemos podido conversar algo, aunque repite que lo ha pasado muy mal y llegó incluso a perder la noción del tiempo", matizó.
Lo que más recuerda del momento de su rescate por la Policía en un chalet de Almonte (Huelva) es la figura del policía al que vio primero "a quien llama el gigante". Rafael Ávila, según su hermano, no se esperaba "jamás que la policía diese con él porque era muy difícil que lo encontrasen".
Con respecto a las imágenes distribuidas por el Ministerio del Interior en el momento de su rescate, José Manuel Ávila ha asegurado que la familia ha dado su permiso para difundirlas, "porque Rafael quiere que la opinión pública y los jueces vean que el secuestro es un tema muy serio y cruel". Ha recalcado que los secuestradores habían sido "muy crueles" con su hermano, y aunque ha dicho que no lo maltrataron físicamente, añadió que había sufrido temperaturas extremas, "con mucho calor de día, frío de noche, totalmente maniatado, con los ojos vendados y comiendo pero mal". "Todo eso no era necesario", añadió.
Ha asegurado a los periodistas que Rafael Ávila tardará "mucho tiempo" en poder realizar alguna declaración pública porque de momento "quiere estar tranquilo y rodeado de su familia". Entre los numerosos familiares y amigos que se han acercado hoy a la casa familiar de los Ávila, la anécdota de la jornada la ha protagonizado uno de sus hijos, también llamado Rafael, que entraba en la casa con un jamón y aseguraba a los periodistas que su padre se encontraba "muy bien".