Se suspende el paro y la provincia recupera lentamente la actividad
Más de ochenta contenedores salen del muelle gaditano a diario La minoritaria Plataforma del Transporte sí mantiene las movilizaciones
| Actualizado:Como una máquina que se reactiva tras pararse en seco, la actividad del transporte en la provincia de Cádiz ha comenzado a recuperar poco a poco la normalidad, mientras la huelga de camioneros se desvanece.
Ayer, las tres patronales que convocaron el paro de los camiones-Fenadismer, Confedetrans y Antid- lo «suspendieron temporalmente» al verse superadas por la mano dura del Gobierno y la falta de ingresos de sus asociados. De hecho, el principal motivo de la suspensión de la huelga es «no ocasionar más perjuicios a la maltrecha economía de este sector», según recogen las asociaciones en un comunicado que leyó ayer el presidente de Fenadismer, Julio Villaescusa.
La «suspensión» del paro no representa la desconvocatoria del paro, según el comunicado. Incluso se anuncia que en los próximos días se realizarán nuevas movilizaciones contra la subida del precio del gasóleo, aunque no se ha especificado qué actos de protesta están previstos.
Villaescusa aseguró que desde sus asociaciones mantendrán «la actitud de diálogo con el Gobierno, a fin de buscar soluciones», aunque siguen negándose a aceptar el acuerdo firmado por el Ministerio de Fomento y la CETM, que el presidente de Fenadismer calificó, de «papelajo firmado de forma irresponsable». Villaescusa considera que con este paquete de 54 medidas, el Ejecutivo «ha cerrado en falso la crisis, taponando una herida que volverá a abrirse». Fenadismer, Confedetrans y Antid representan a un 35% de los 5.000 camioneros de la provincia, según el coordinador de estas patronales en Cádiz, Francisco Rodríguez. Esto supondría que más de 1.700 conductores volverían al trabajo en la provincia gaditana.
Concentración en Jerez
Tras la retirada «temporal» de estas tres asociaciones, sólo la Plataforma en Defensa del Transporte, cuya representación entre autónomos es mínima, mantiene las movilizaciones. Ayer, sus miembros, fundamentalmente transportistas autónomos, vieron frustrada su intención de manifestarse ante la sede del Ministerio de Fomento en Madrid para exigir la creación de una tarifa mínima de transporte que supla la subida del gasóleo.
Sin embargo, los camiones fueron paralizados antes de llegar a Madrid desde primeras horas de la mañana por un dispositivo especial de 25.000 agentes de la Guardia Civil, que estableció controles de tráfico en diferentes puntos del país. En estos controles se paró a todo camión que no llevara mercancía o que no pudiera probar que acudía a cargar a la capital española. Un número indeterminado de vehículos fueron retenidos en diferentes estaciones de servicio y áreas de descanso. En Andalucía, uno de estos controles se situó en el cruce de Guarromán, en la provincia de Jaén, desde el que se accede al puerto de Despeñaperros. Tanto la Plataforma, como Fenadismer y Confedetrans tacharon ayer esta actuación de «secuestro ilegal».
En la provincia de Cádiz, unos doscientos camioneros representados por la Plataforma se concentraron en la Ciudad del Transporte, ante la imposibilidad de viajar a Madrid. «Teníamos previsto salir, pero nos lo han impedido las autoridades», explicaba ayer el portavoz de estos conductores, Manuel Gil.
El transporte por carretera en el resto de la provincia sigue funcionando con relativa normalidad, sin presencia alguna de piquetes. Sin embargo, el regreso de los camioneros al trabajo no es suficiente para recuperar la rutina habitual de la actividad, que se restablece a ritmos diferentes en cada sector.
Los supermercados han sido los primeros en funcionar con «total normalidad», como aseguraban ayer en cadenas importantes como Mercadona. Por su parte, las gasolineras de la provincia han quitado ya los carteles de «no hay diésel» que han permanecido colgados en los surtidores durante toda una semana, aunque estos días las ventas «han caído un 50%» explica Ángel Zamorano, presidente de la Asociación provincial de Estaciones de Servicio.
También los agricultores han retomado la recolección y en una de las cooperativas más importantes de la provincia, la Virgen del Rocío de Sanlúcar, ayer se amontonaban todo tipo de productos frescos a la espera de la subasta de hoy. «En la anterior, la del sábado, hubo buenas ventas que esperamos mejorar en ésta», apuntaba Juan Manuel Villegas, jefe de subastas. Los camiones también han llegado a las explotaciones para recoger la leche y aliviar la crisis de los ganaderos, que se han visto obligados a tirar cientos de miles de litros. «Aún queda mucha almacenada, pero confiamos en que en estos días todo se normalice», hacía hincapié el responsable del sector de Asaja, Juan Sánchez, que añadía que «el fin de semana tuvimos incidentes con piquetes, que rompieron las lunas de varios camiones».
Al borde del colapso
El muelle de Cádiz ha sido uno de los últimos en reactivarse tras la huelga. De hecho, ayer su situación superaba aún el borde del colapso, con una ocupación de almacenaje superior al 100%, con 950 plataformas que han tenido que ser aparcadas en espacios que no suelen estar destinados a ello. El viernes se organizó la partida de 90 vehículos en dos convoyes escoltados por la Guardia Civil y durante el fin de semana salieron del puerto al menos treinta camiones más. Sin embargo, el espacio que dejaron fue insuficiente para acoger los 370 nuevos remolques que llegaron al muelle en cuatro barcos procedentes de Canarias y Marruecos. Ayer el muelle ciudad volvía a recibir cabezas tractoras que a lo largo de la tarde trasladaron fuera del puerto alrededor de 80 contenedores sin escoltas.