Bea, la guapa

De patito feo a cisne. Esta metamorfosis ha captado a audiencia millonaria de medio mundo con Yo soy Betty, la fea, la telenovela colombiana escrita por Fernando Gaitán. Hoy, en horario estelar, Aida deja paso a Yo soy Bea en Telecinco, para que la audiencia disfrute con la transformación de Ruth Nuñez. La trama romántica entre Bea y Álvaro está a punto de culminar en boda, que se verá el día 20, fecha en que la serie dará un giro con la nueva protagonista, Be (Patricia Montero). Mientras, el martes desembarca en Cuatro la versión estadounidense, Betty, protagonizada por América Ferrera, que lleva dos temporadas triunfando en la ABC y ha ganado dos Globos de Oro y tres Emmy.

Las aventuras de los personajes de Bulevar 21 a lo largo de casi dos años y más de 460 capítulos han servido para convertir a Yo soy Bea en la telenovela más vista de los últimos diez años, con una cuota de pantalla del 31,3%. Actualmente, la media se sitúa en un 27%, un buen dato frente a la competencia. Para Ruth Núñez, la protagonista, este periodo ha sido largo y a la vez corto, un tiempo en que se ha entregado en cuerpo y alma al trabajo ante los fuertes planes de rodaje. «Ha sido agotador, pero también muy bonito. Estos dos años se me han hecho como diez, me parece que llevo toda la vida haciendo lo mismo, aunque, por otro lado, ha sido tan seguido que da la impresión de que se ha detenido el tiempo. Son sensaciones contradictorias, raras».

Núñez no sabría decir si habrá un antes o un después de Bea en su trayectoria profesional. No ha recibido ninguna oferta, aunque tampoco podría haberla aceptado. Ahora, tras unas vacaciones, probará suerte con una obra de teatro. Al preguntarle cuál es el secreto del éxito de Yo soy Bea, dice que todo el mundo le interroga sobre lo mismo. «Creo que el autor es un genio. Él se inventó esta historia, una parodia de las telenovelas, y no sólo ha triunfado internacionalmente la serie original sino que en se han hecho adaptaciones. La historia tiene mucho de canto a la superación personal. Todos nos sentimos identificados con las vicisitudes de Bea, y luego está la historia de siempre, la de chica conoce a chico, se enamora y le consigue al final. Ahora, el secreto real no lo sé. Cuando empezamos yo me preguntaba quién querría ver la serie, después de haber triunfado aquí (Antena 3) la original colombiana».

La versión de EE UU

Ruth Núñez cree que todos nos hemos sentido en algún momento patitos feos. «Todos en la adolescencia hemos querido que nos tragara la tierra en un determinado momento». ¿Es importante la belleza para conseguir el amor? «Para conseguir el amor no, para ligar sí. En la serie, Bea provoca al principio el rechazo en Álvaro. Pero lo bueno de la historia es que él se enamora de ella antes de que se vuelva guapa, por cómo le trata ella y su forma de ser».

Y sin miedo a una posible saturación de la audiencia, Cuatro estrena el martes la versión estadounidense (Ugly Betty), ocupando un lugar de lujo, el de House, y en plena Eurocopa. El papel se ha encomendado a la estadounidense de origen hondureño América Ferrera, la protagonista de Las mujeres de verdad tienen curvas. La actriz Salma Hayek, productora, vio un filón en la historia y en seguida puso cara a la protagonista.

Ferrera ha visto telenovela original, la versión mexicana y la española. «Es estupendo que en países tan distintos puedan adoptar el personaje de Betty, y es curioso cómo en todas las versiones hay algo de nosotras en cada Betty. Todos podemos sentirnos como ella en algún momento de nuestras vidas». La joven actriz reconoce que la talla, el peso y la imagen es un problema que está en todas partes. A la hora de trazar su aspecto, los autores se han guiado por el original colombiano: gafas, flequillo y aparato dental. «Estuvieron a punto de ponerme granos, pero eso era ya llegar a la caricatura».