Primer gran día de fiesta

La Feria puertorrealeña explotó de alegría y bullicio la noche de ayer jueves, y las veinticuatro casetas instaladas en el recinto de Las Canteras estaban llenas casi a tope. La reina y sus damas bailaron bajo la mirada de los miles de farolillos que tapizan el techo de las casetas de la Feria, en la que la animación se prolongó hasta la madrugada.

Los puertorrealeños aprovecharon que el recinto ferial es un abierto 24 horas y no dudaron en ejercer de okupas en las casetas. No había quien los echara a pesar de que hoy no es un día festivo en la Bahía.

La segunda noche de fiesta fue masiva y el recinto de Las Canteras registró el primer lleno, que se repetirá con casi total seguridad hoy y durante el fin de semana. Y es que Puerto Real vive más intensamente la Feria por la noche. Los visitantes al real no tienen hora para irse a casa y no desaprovechanla ocasión de unir la noche con la mañana mientras pasan un buen rato con los amigos.

Así ocurrió la pasada noche del jueves y en las casetas no hubo tregua. Las de los estudiantes de la Universidad de Cádiz, como suele ser habitual año tras año, estaban a rebosar. De hecho, fueron las que estaban más llenas de la feria.

Si hay un rasgo que destaque por encima de los demás en las casetas de los jóvenes, en contraposición a la de asociaciones de vecinos o partidos políticos, es que no hay recato a la hora de poner música. Vale toda y se asiste a una exhibición de distintos géneros. Desde las sevillanas hasta el baile del televisivo cantante Rodolfo Chikilicuatre, sin solución de continuidad todos los estilos son bien recibidos. Lo importante es no parar. No ne balde, en la feria de Puerto Real las casetas son el alma mater, muy por encima de las atracciones. Y es que las casetas son el núcleo central de la pequeña ciudad efímera que se crea en este recinto cada mes de junio.

Hoy viernes, entre los actos que tendrán lugar en la feria, caben destacar la actuación en la caseta Peña Flamenca Canalejas del cuadro flamenco de la propia entidad que dirige Tere Andréu. En la caseta 5x5 se podrá bailar al ritmo de La Costa y disfrutar de una noche de animación con salsa caribeña.

Por su parte en la Caseta Municipal, actuarán las orquestas Libertad y Barrabás y, en la Casa de Colombia, todo el que lo desee podrá incorporarse a los ritmos de la salsa, merengue, bachata y reguetón. Para los espectáculos de los caballos habrá que esperar mañana y al domingo.

En cualquier caso, tanto al mediodía como en la madrugada, los aficionados podrán encontrar algo más que los éxitos de moda emitidos de forma multiplicada por los altavoces de titánica potencia. El flamenco, acompañado de los trajes de volantes en movimiento, estará presente en todo el real.

Así por ejemplo, si el aficionado se acerca a la acogedora caseta de la Peña Flamenca Canalejas de Puerto Real, comprobará que allí suenan las sevillanas, pero también se percatará de que se apagan los equipos de música para dar paso al flamenco en directo. Y es que, además de las sevillanas, el aficionado se encuentra con todos los palos flamencos. Festivos y con buen compás. Rumbas, tangos, alegrías, colombianas, bulerías y canciones. Las academias locales de baile tuvieron un gran protagonismo, ya que muchas llevaron a sus jóvenes estrellas a las tablas para deleite de los asistentes a las casetas.

Cuarenta mil litros

El invento tan poco castizo y flamenco del rebujito está ganando bastantes puntos en el combate que mantiene, desde hace muchas ferias, con el vino fino y la manzanilla. Los puertorrealeños -según datos de diversos distribuidores de bebidas- se van a beber durante la Feria aproximadamente cuarenta mil litros de vino. Para los amantes de las estadísticas, hay que apuntar que la cantidad de vino que se ingerirá en el recinto de Las Canteras equivale a casi litro y medio de vino por puertorrealeño.