Siete años después
Actualizado: Guardara apertura del juicio contra cinco acusados de organizar los atentados del 11-S -entre ellos Khaled Cheikh Mohammed, presunto 'cerebro' de la conspiración-, trata de avanzar en la depuración de responsabilidades por el brutal ataque terrorista, ofreciendo al fin una oportunidad para que los acusados puedan ejercer su defensa siete años después. Pero también demuestra la desmesura de las críticas contra la investigación que desembocó en la condena de los principales implicados en la matanza del 11-M en Madrid, en un proceso que acabó resuelto con elogiable eficacia y que se desarrolló con plenas garantías para los imputados. Garantías sobre las que existen serias dudas en el caso de la vista iniciada ahora en la base naval de Guantánamo, a cargo de un tribunal militar de excepción y donde se admiten pruebas o testimonios obtenidos por la fuerza de unos sospechosos que fueron retenidos irregularmente en cárceles secretas de la CIA.