Hamilton llega a Montreal como líder pese al dominio de Ferrari sobre McLaren

Un tercio de la temporada figura ya como tachado en el calendario. Seis carreras consumidas y pocas novedades con las que alimentar el espíritu. Al margen de Fernando Alonso, por negativo, y de Robert Kubica, en lo positivo, nada ha cambiado. Los podios se los reparten los de siempre y, como en 2007, Lewis Hamilton figura al frente de la nómina de pilotos.

Entonces, había que hacerse cruces para corroborar la realidad de tal situación. Ahora, también. Porque el piloto inglés rentabiliza su inferioridad, algo que parece inverosímil en un mundo sin perdón como laF-1. Llega el delfín de Ron Dennis en la cresta de la ola a la isla de Notre Dame, pese a que las mejores figuras se las han apuntado los Ferrari. Cuatro victorias, dos segundas y terceras plazas de los bólidos de Maranello por una secuencia 2-1-2 de la escudería angloalemana. Con una particularidad vital. Lewis hace acopio de podios casi en solitario en su bando, mientras que Raikkonen y Massa se lo reparten todo, lo que en estas lides es demasiada ventaja para el rival.

Y es que la lógica se resquebraja cada vez que se le añade el nombre del ex compañero de Alonso, ahora number one imperturbable en McLaren. Su cuenta de resultados ha mermado en 10 puntos respecto al primer tercio de la temporada anterior, mientras que Raikkonen ha mejorado en 8 puntos y Massa en uno. ¿Dónde está el truco? En Fernando Alonso. Sus 40 puntos de hace un año figuran ahora concentrados.

Accidente con un Porsche

El padre del piloto británico Lewis Hamilton sufrió un aparatoso accidente al volante de un deportivo prestado con el que se estrelló contra un parque infantil cerca de su domicilio, sin causar heridos. Después pidió disculpas por lo sucedido.