«No damos abasto para investigar denuncias sobre pornografía infantil»

Las detenciones de pedófilos que almacenan y distribuyen pornografía infantil a través de Internet empiezan a ser una constante que genera gran alarma social, al poner de manifiesto el movimiento de este tipo de archivos en la red, así como el elevado número de consumidores de películas y fotografías con los niños como víctimas sexuales. De hecho, al Grupo de Delitos Tecnológicos de la Comisaría de Málaga se le acumula el trabajo, dado el gran número de denuncias que recibe, además de las investigaciones propias que debe llevar adelante.

-Pornografía infantil en Internet. Un caso detrás de otro. ¿Qué está ocurriendo?

-La impresión que yo tengo es que es un delito que ha existido siempre, lo que ocurre es que ahora, las nuevas tecnologías facilitan ese intercambio de fotografías, vídeos, imágenes... la facilidad de intercambio de ficheros es tremenda, y a escala internacional.

-En la operación Lobo ha aparecido un nuevo término: 'Pederastas de calidad', que ofrecen producción propia. ¿Hablamos de grabaciones hechas en España?

-La operación Lobo parte de Austria. Sí se ha grabado pornografía infantil, pero no ha sido en España. A la gente que se ha detenido en España ha sido por intercambio de ficheros y por distribución, no por producción. Hablamos de una operación internacional, que ha actuado en muchos países europeos, y sí que ha habido producción, pero no en España.

-Al margen de esta operación, ¿tiene conocimiento de que se produzcan aquí videos de pornografía infantil?

-En dos años que llevo investigando esto, he escuchado un caso unicamente. En el resto se ha producido distribución de pornografía infantil.

-¿Se puede determinar con claridad quién distribuye, quién consume...?

-Puede haber personas que, además de tener archivos y vídeos de pornografía infantil, los distribuyan a través de internet. Eso es lo que perseguimos. Puede ocurrir además que esa persona sea un educador de niños o un pediatra y puede que a la vez estén abusando de menores. Esa investigación iría por otro lado. Nosotros perseguimos la distribución.

-¿Y si no distribuye pero visualiza?

-Normalmente no lo perseguimos. Internet es libre y tú visualizas en unas páginas que no son de tu ordenador. Son páginas de un servidor que, a lo mejor, está en Alemania, en Estados Unidos o en Australia. Sólo por visualizar no se persigue. Ahí, en principio, no se comete delito. El que comete delito es el que está poniendo las páginas web en ese servidor.

-¿Cómo se mueve el material?

-A través de canales de chats o bien por programas P2P (Peer to Peer), que son de distribución de archivos y en este caso no es necesario ni que se conozcan entre sí. Por los canales chat, sí se pueden conocer entre ellos. Chatean, se conocen e intercambian archivos. Los programas Peer to Peer son impersonales. En tu software cuelgas unos ficheros de pornografía infantil y otro usuario que tenga el mismo software (Emule, Ares, Elephant u otro) se puede conectar. Ese software tiene un buscador. Tú buscas, por ejemplo, con la palabra pedofilia y cualquier usuario que tenga un fichero de pedofilia en su ordenador...

-Entonces, también son fácilmente localizables

-Por supuesto. De hecho, aquí lo hacemos en investigaciones iniciadas por nosotros, sin denuncias. Ponemos la palabra pedofilia, por ejemplo (hay muchísimas siglas y palabras que utilizan la comunidad pedófila). Nos salen ficheros. Los comprobamos, discriminamos si hay pornografía infantil y entonces planteamos una investigación para llegar a las personas que están accediendo a los ficheros.

-¿Qué ocurre cuando se detecta un foro de pedófilos?

-Si alguien pone en mi conocimiento, con una denuncia, que hay un foro que atenta contra los niños y está en un servidor nacional, yo me dirijo al administrador del servidor con mandamiento judicial y le digo que quite ese foro.