El ministro de Economía, Pedro Solbes, durante el encuentro del consejo ministerial de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) celebrado en París, Francia. /AFP
revisión semestral de perspectivas económicas

La OCDE rebaja ostensiblemente la previsión de crecimiento económico para España

Reduce nueve décimas su pronóstico para 2008 -hasta el 1,6%-, y en 1,3 puntos las del año próximo -hasta el 1,1%-, en el mayor desplome entre los grandes países miembros del organismo

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La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) ha rebajado nueve décimas sus previsiones de crecimiento para España en 2008, hasta el 1,6%, y hasta el 1,1% en 2009, lo que supone el mayor desplome entre los grandes países miembro. La revisión semestral de perspectivas económicas de la OCDE rebaja sustancialmente el crecimiento de los países miembros para este año y más aún para 2009 respecto al informe de diciembre.

Esas estimaciones quedan lejos de las del Gobierno español, que mantiene como cifra oficial una progresión del 2,3% en 2008 -ayer el ministro de Economía, Pedro Solbes, ya advertía de que se podía quedar en el 2%-, e incluso del 2,2% augurado por la Comisión Europea en abril.

A pesar de que la OCDE ha corregido abruptamente a la baja las expectativas anunciadas, sobre todo al constatar un ajuste en vivienda más importante del esperado, Solbes se ha resistido hoy de nuevo a modificar sus perspectivas de crecimiento para este año. "Somos conscientes de que estamos viviendo una situación de ajuste" pero el crecimiento de la economía española "va a estar ligeramente por encima del 2% este año", ha afirmado Solbes en una conferencia de prensa en París.

De cumplirse las estimaciones, por primera vez desde la creación de la moneda única el PIB español aumentaría menos que la media de la eurozona, para la que se estiman subidas del 1,7% este año y del 1,4% en 2009, tras disminuír también sus expectativas. Su análisis es que, al menos hasta que no concluya 2009, no hay que esperar una mejora respecto de la "atonía" constatada en el primer trimestre de 2008, cuando el ritmo interanual de expansión se ralentizó hasta el 1,2%.

Ajuste en el mercado inmobiliario

Como razón se alude al retroceso en el mercado de la vivienda, donde han disminuido los permisos de construcción, precios y créditos hipotecarios (un 25% en ritmo anual), y ha repercutido en la demanda interior. Las supresiones de empleo en la construcción, que han elevado el número de parados, han dado al traste con la confianza de los consumidores, según ha indicado la OCDE, lo que se ha visto reflejado en el descenso de las venas de coches o la evolución negativa de servicios y producción manufacturera.

El secretario general de la OCDE, Ángel Gurría, ha justificado esas cifras porque en España, "después de muchos años de tener un comportamiento mejor que el promedio de Europa", la construcción, que ha tenido un peso mucho mayor que en otros países, "está sufriendo un ajuste muy importante, y eso está afectando al ritmo de crecimiento total y a la expectativa de crecimiento".

El ministro español, ha considerado sin embargo que las previsiones "son excesivamente pesimistas" y que no tienen en cuenta el impacto positivo del paquete de medidas fiscales puesto en marcha, una inyección de 10.000 millones de euros que "incrementarán el consumo privado en un 0,7% este año y en un 1% el próximo, aportando dos décimas de PIB en 2008 y tres en 2009.

La inflación no deja de crecer

Además, la inflación no ha dejado de crecer y se situaba en el 4,2% en términos interanuales en abril, con la particularidad de que el diferencial con la zona euro -indicador de pérdida de competitividad- ha vuelto a colocarse en más de un punto. Las subidas del petróleo y de los alimentos se traducirán en un nuevo repunte de la inflación en los próximos meses, con una media del 4,6% en 2008 y del 3% en 2009.

Solbes ha tratado de relativizar ese incremento del diferencial hasta 1,1 puntos al señalar que ya se había dado en el pasado, y lo ha atribuído a la mayor dependencia del petróleo de la economía española -que la hace más vulnerable a la actual escalada del crudo-, pero también a otras subidas de precios en algunos servicios.

La OCDE preconiza suprimir la indexación de los salarios con la inflación pasada para reducir el coste en términos de empleo en el contexto actual, teniendo en cuenta que prevé que el paro, que era del 8,3% de la población activa de media en 2007, crecerá hasta el 9,7% este año y hasta el 10,7% el próximo.

Las finanzas públicas se resienten

Sobre las finanzas públicas, que habían cerrado 2007 con un superávit del 2,2%, mejor del previsto, se prevé una inflexión, ya que los ingresos van a disminuir probablemente por la ralentización económica, mientras la orientación del gasto anunciada por el gobierno es expansionista para este año.

Así, con la rebaja fiscal, las nuevas prestaciones para familias con hijos a cargo, las inversiones en infraestructuras y las ayudas a la compra de viviendas sociales, el superávit se limitará en 2008 al 0,7% del PIB y en 2009 la OCDE aventura un déficit del 0,3%.