
Prefiere un PP de centroderecha a una escisión de extremaderecha Defiende que la energía nuclear no es una apuesta de futuro Considera que la consulta de Ibarretxe no puede salir adelante Advierte de que ETA «todavía nos puede hacer sufrir»
Actualizado: Guardarodríguez Zapatero aseguró que prefiere que exista un partido de centroderecha a que se produzca una escisión en el seno del PP y lleve a la división de «un partido de centroderecha y otro de extremaderecha». Señaló que prefiere «la primera opción», opinó que el PP «está en un mar de dudas y de debates», y expresó su deseo de que, desde el respeto a las decisiones que tomen, eso no afecte a un clima y un trabajo que permita tener entendimiento y algún acuerdo en materias importantes. El jefe de Gobierno dijo que la energía nuclear «no es mi apuesta» y subrayó que hay que hacer un esfuerzo para cambiar los recursos energéticos a favor de las energías renovables, «que son las que nos darán un futuro». Zapatero aseguró que «no debemos hacer una apuesta de futuro por incrementar el parque nuclear», aunque matizó que se debe amortizar esta parte energética y mantener la vida útil de las actuales centrales nucleares. El líder del Ejecutivo se mostró convencido de que la iniciativa de referéndum del lehendakari, Juan José Ibarretxe ,»no tiene posibilidades» de desarrollarse porque «no respeta las reglas del juego» de las leyes, de la Constitución y del Estatuto. Rodríguez Zapatero subrayó que se trata de una propuesta «sin sentido político» que sólo se explica por la «preocupación» y la «angustia preelectoral» que sufre el lehendakari. La iniciativa de Ibarretxe, dijo, «divide y agita». El presidente alertó de que, a pesar de la debilidad de ETA, la banda terrorista todavía «nos puede hacer daño, nos puede hacer sufrir». Zapatero dejó claro que el Estado y las Fuerzas de Seguridad del Estado «están fuertes» en la lucha contra ETA, como ha quedado demostrado con la reciente detención en Francia «de una parte importante» de la cúpula de ETA, en referencia al arresto del presunto número uno de la banda, Francisco Javier López Peña.