El propietario de Jale reconoce ante el juez que no tenía avales, según el abogado de la acusación
Actualizado:El propietario de Grupo Jale, José Antonio López Esteras, y uno de sus hijos, ambos imputados por un delito de estafa y malversación de fondos, reconocieron hoy ante el juez que no emitieron avales de las cantidades que les fueron entregadas a cuenta, pese a que estas llegaron a superar los 600.000 euros, según indicó el abogado de la acusación.
Esteras y su hijo se personaron hoy en el Juzgado de instrucción número uno de Jerez para comparecer por la querella criminal interpuesta por 13 clientes que reclaman al empresario más de un millón de euros, contando daños y perjuicios.
En declaraciones a los periodistas, el abogado de la acusación particular, Angel González Rodríguez, que representa a once de los querellantes, se mostró convencido de que "hay más gente afectada, porque Jale es una empresa fuerte que mueve muchas promociones de viviendas" y señaló que no sabía el motivo de por qué el otro hijo imputado en este caso no se había presentado.
González Rodríguez explicó que la primera querella criminal fue presentada por un solo inversor, que invirtió una cantidad elevada -499.000 euros- por la compra sobre plano en 2006 de 22 viviendas en Residencial San Mateo de Jerez y en Arcos a inmobiliaria Amuerga, perteneciente a Grupo Jale. Este cliente decidió denunciar "porque aunque en el contrato se recogía que se debían avalar las cantidades que se entregaban, resulta que no se avalaron tales cantidades".
En este sentido, aseguró que la "causa más fuerte" es la falta de avales, "porque como han presentado suspensión de pagos, probablemente esas cantidades que se han entregado se van a perder". Asimismo, manifestó que otra de las causas señaladas en la querella "son las importantes partidas de dinero que se entregaron en 2006 sin haberse hecho obras, puesto que se tenían que haber entregado las viviendas el 28 de febrero de 2008, y no sólo no se han entregado las viviendas, sino que los trabajos están paralizados. Hay clavada una banderola de Jale, pero no se han hecho las obras".
El abogado también aseguró que el señalamiento del juicio por esta causas "va para largo", ya que tres de los "perjudicados" por este proceso viven en Estados Unidos y no se les va a tomar declaración hasta el mes octubre. Asimismo, sigue pendiente todavía la toma de declaración del último de los imputados, el otro hijo de López Esteras.
Además de los delitos de estafa y malversación de fondos, los tres imputados están acusados también por apropiación indebida, insolvencia punible y daños por imprudencia grave, a raíz de las querellas criminales interpuestas, que podrían sumar 12 ó 14 años de cárcel en el caso de que sean condenados por los mismos.