Más imputaciones por corrupción acosan al jefe del Gobierno israelí
El empresario estadounidense Morris Talansky levantó ayer una gran polémica en Israel al afirmar ante una corte en Jerusalén haber entregado al primer ministro israelí, Ehud Olmert, más de 150.000 dólares -96.000 euros- para sus campañas electorales y gastos personales de hoteles y vuelos de primera clase. «Sólo sé que a él le gustaban los cigarros costosos, las plumas para escribir y los relojes. Me pareció extraño. Pero nunca esperé nada a cambio. Sólo tenía una gran admiración por él», dijo el empresario en el tribunal.
Actualizado:Talansky, un hombre de negocios judío de 75 años, permaneció en el juzgado alrededor de siete horas después de declarar en el caso de corrupción en el que presuntamente está implicado Olmert, quien podría dimitir de su cargo como jefe del Gobierno si es inculpado en este proceso judicial que se adelanta en su contra.
Con este nuevo incidente, la popularidad de Olmert sigue en caída libre. Miles de ciudadanos pidieron ya la renuncia de Olmert después de la segunda guerra del Líbano de 2006 y tras un informe que la llamada Comisión Winograd presentó a raíz de ese enfrentamiento bélico en el que el primer ministro fue acusado de fracaso.
Los sectores de izquierda han cargado contra Olmert por su falta de liderazgo para llegar a un acuerdo de paz con los palestinos y varios grupos de derecha lo han criticado por su reciente apuesta por la negociación. Mientras pronunciaba un discurso el jueves, el primer ministro fue interrumpido por decenas de manifestantes que lo abuchearon y gritaron en contra de la entrega a Siria de los Altos del Golán. La protesta se produjo poco después de que el Gobierno admitiera que había iniciado contactos para buscar la paz con Damasco.