Jerez

«Para ser sublimes hay que tomar sus riesgos»

El presidente de la mejor bodega del mundo comienza el día en Château D´Yquem y lo remata en Cheval Blanc, dos templos del arte de hacer vino. «No niego que soy un tipo afortunado», dice Pierre Lurton, que ayer comparecía por primera vez en Jerez.

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-Burdeos y Jerez, ¿dos planetas distintos?

-Dos fantásticos planetas. Marte y la Luna. No hay agua pero se hace buen vino -ríe-.

-¿Qué es para usted Château D´Yquem?

-Es mito, es misterio con una faceta inaccesible. Pero no lo es: lo queremos abrir a todo el mundo.

-¿A qué precio?

-Bueno, más valdría invitar a todo el mundo. Realmente nuestra bodega es un mundo de complejidad inabarcable. Es sublime y para serlo hay que tomar sus riesgos con la naturaleza. Si no se da la climatología, no habrá vino. Es un difícil equilibrio entre el clima atípico, la tierra y los hombres que viven en ella.