La bodega y sus 'duendes'

La nueva puesta en escena de los vinos que se crían en bodegas Valdivia es una de las recientes apuestas de Nueva Rumasa. Volvió de nuevo a manos de la familia Ruiz-Mateos uno de los lugares más emblemáticos de esta familia empresaria. En este lugar de la calle Don Zoilo está el palacete llamado Villa del Duque, donde ya don Zoilo Ruiz-Mateos hospedaba a sus invitados, justo enfrente de donde se encontraba su vivienda habitual en Jerez.

Ahora, Villa del Duque seguirá siendo lugar de residencia de la familia Ruiz-Mateos, mientas a su alrededor habitan tres cascos de bodegas con espacio suficiente como para acoger alrededor de diez mil botas de caldos jerezanos. Del mosto, del vino y del brandy son los nombres de estos tres cascos, donde las andanadas separan esas criaderas impresionantes y donde el vino duerme y coge cuerpo.

Rocío Verano se encarga de recibir a las visitas, y nos presenta la bodega con gran prestancia y simpatía. «No hay que andar ná», comenta Verano como origen de la palabra andanada. Presuntamente, ésta nació de boca de los antiguos arrumbadores, ya que cuando se les olvidaba cualquier herramienta en el otro extremo de la pasillo ir y volver al lugar de origen era toda una caminata.

Repaso

Condiciones del Marco de Jerez, albariza, tipos de uvas, pisa de la uva o sistema de crianza por medio de soleras y criaderas, éstas son algunas de las explicaciones que todo visitante recibe en Valdivia. A continuación, Verano nos hace una advertencia: «En nuestras bodegas no tenemos ni caballos ni ratones, pero sí existen los duendes. Entren y vean ». Así es como se entra en una sala oscura donde se proyecta un moderno audiovisual. Un primer vídeo sobre la ciudad y un segundo sobre sus iconos más representativos, ambos espectaculares y con ciertos toques Disney, pero sin duda interesantes.

Valdivia y Villa del Duque son ahora de Nueva Rumasa y podríamos decir que finalmente han vuelto a casa.