EN LA CIUDAD. Alonso enfila una curva durante una de sus vueltas de ayer. / EFE
FÓRMULA UNO GRAN PREMIO DE MÓNACO

Alonso saldrá séptimo en una parrilla dominada por los Ferrari

El asturiano acusó durante la calificación la falta de agarre del R28 Las previsiones de lluvia aumentan sus opciones de cara a subir al podio

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Felipe Massa irradiaba felicidad tras marcar una pole position más en su palmarés. Ya lleva 12, y dos consecutivas, después de la de Turquía hace quince días y la ha logrado en un trazado que no le gusta nada. El brasileño tendrá todo a favor para lograr la victoria, ya que salir primero da muchas posibilidades para lograr la victoria final, siempre y cuando no haya accidentes, despistes del piloto, fallos mecánicos o el clima juegue una mala pasada. Fernando Alonso hizo lo que pudo con el R28 y se situó en séptima posición, favorecido por los fallos de Coulthard y Heidfeld.

El brasileño estará acompañado por Kimi Raikkonen. Ferrari le ganó la primera batalla a los McLaren, que se tuvieron que conformar con la segunda línea. Ferrari ansía la victoria , que no consigue desde 2001. La tercera fila de la parrilla estará ocupada por Robert Kubica y la sorpresa llamada Nico Rosberg. El piloto alemán estaba muy contento, y también su jefe, Frank Williams, que este fin de semana llega a las 600 carreras. Fernando Alonso se situará en la cuarta fila junto a Jarno Trulli.

Suerte para el asturiano

La sorpresa de la jornada la dio Nelsinho Piquet. El brasileño no pasó del primer corte y además hizo una derrapada espectacular que le libro de tocar con el neumático izquierdo trasero. Ferrari y McLaren hacían de las suyas en la cabeza de la clasificación y Alonso fue 13º a 1,5 segundos de Massa, muy lejos del ritmo de los líderes.

El asturiano tuvo la suerte de su lado durante la segunda parte de la calificación. El R28 no se movía con facilidad por el enrevesado trazado y el bicampeón del mundo lo tenía complicado para estar entre los diez primeros clasificados y entrar en la última parte, la Q3. Pero Coulthard, al salir del túnel, perdió el control de su Red Bull y se arrastró a toda velocidad contra las vallas de protección en su parte derecha. El escocés perdió una de las ruedas, que salió rodando por la pista. Alonso se benefició del incidente y acabó noveno, por delante de Coulthard. Por si acaso, Nick Heidfeld también le echó una mano. El piloto de BMW, de forma incomprensible, se quedó fuerade los diez mejores.

En la última ronda, Alonso logró un meritorio séptimo puesto con un coche que no conseguía demasiado agarre, según comentó a sus mecánicos e ingenieros. Al bajarse del coche, el asturiano no estaba del todo descontento. «He sido séptimo otra vez y ya van varias este año», comentó de forma irónica. «Mañana (por el domingo) espero estar más arriba en la clasificación y marcar más puntos». La lluvia sigue siendo una seria amenaza para la carrera, y si así fuera, Alonso aseguró que si hay agua, la carrera será una lotería. «No tenemos nada que perder, y de esa forma igual salimos ganando», apuntó.