Todo preparado para la 'chikifiesta'

Ya lo dice la palabra: invitación a la fiesta. O, al menos, así ha definido el Chiki chiki él mismo. Sí, quien le pone voz, el famoso y extravagante Chikilicuatre. Famoso porque, a estas alturas, el rostro de este argentino afincado en Castelldefells resulta más que familiar. Y extravagante porque no se recuerda otro representante español en el Festival de Eurovisión de sus características. A saber: uno, el tupé estilo Elvis; dos, grandes gafas a los años ochenta; tres, guitarra de juguete -más conocida como Luciana-; y, cuatro, ningún sentido del ridículo y mucho del humor. Es decir, la máxima expresión del frikismo. La receta no le ha ido mal. Empezó como una broma en La Sexta y ya va por los 2.300.000 visitas en el canal de RTVE en YouTube. Por si fuera poco, su canción lidera las descargas de tonos para móviles e incluso en la localidad zaragozana de Illueca pensaron en cambiar el nombre de la calle General Franco por el de Chiki Chiki.

Ha llegado el día D, y esta noche el abanderado del crusaíto deberá defender en Belgrado su célebre perreo. Será en la gala que comenzará a las 21.00 horas y que retransmitirá TVE-1 y www.eurovision.tv. Él actuará poco después de las 22.30 horas, en el puesto 22.

Pero, desde mucho antes, sus seguidores ya han empezado a calentar motores para apoyar al candidato. Elena Conde, por ejemplo, piensa dedicar la mañana a aprovisionarse. Hoy son en casa catorce. ¿El plan? Almuerzo, merienda, cena y, si se tercia, recena. Entre toma y toma, juegos de consola, charla, bromas, baile... Todo con la excusa de Eurovisión. Hasta ha enviado a sus amigos invitaciones virtuales en las que aparece ella misma convertida en Chikilicuatre. La idea la sacó de la web de TVE (www.rtve.es), que anima a organizar fiestas temáticas. Incluye todo un kit para no desentonar: desde banderitas para colocar en los canapés, guirnaldas y pósters hasta transfers para estampar en camisetas y tupés, gafas y caretas recortables de Chikilicuatre.

Pero aún hay más. También se pueden descargar formularios para imprimir y rellenar en casa en los que votar al ganador o perdedor del certamen, al concursante más hortera o al más friki. Además, visto el éxito del politono Baila el Chiki Chiki, se ha creado el trivial de Eurovisión para móviles.

Más audiencia

Pese a las numerosas críticas de los puristas, Chikilicuatre tiene su público. De hecho, desde la actuación de Rosa López en 2002, no se recuerda una expectación similar. Entonces, casi doce millones de personas bailaron ante el televisor el Europe's living a celebration. Desde ahí, la audiencia ha caído en picado hasta los apenas tres millones del pasado año, cuando DNash (con un gaditano como miembro del cuarteto de cantantes) quedó en el puesto número 20. Este año, el colaborador de Buenafuente va a por todas. «Me conformo con participar, pero he venido a ganar».

Desde luego, ánimo no le falta -pese a los malos augurios del ensayo general, donde pasó sin pena ni gloria-. Tampoco a sus fans. Y no son pocos. Sólo hay que echar un vistazo en Internet y ver la de páginas, foros y blogs dedicados al susodicho. Animados por la avalancha, Isabel Rodríguez y su familia se han dejado llevar. No son espectadores habituales del festival, pero este año les ha picado la curiosidad. Su cuñado, Esteban, «es un friki». «Le en-canta todo este tipo de gente; además, es fiel de Buenafuente, así que nos ha embarcado para que vayamos a su casa a verlo por televisión», comenta Isabel.

Junto a sus hijos y su marido, esta cajera de supermercado lo tiene todo pensado: preparará tortilla y filetes empanados -«lo más fácil y barato», concreta-. Sus cuñados pondrán unos bocadillos y aperitivos salados. Y todo listo para cenar ante del televisor. Eso sí, antes harán sus apuestas. Hasta hay previsto un premio para quien coincida con el ganador o se acerque más: cada uno pondrá dos euros y el afortunado se llevará el bote. «En realidad, es una excusa para vernos y echar la tarde. ¿Es que sólo nos podemos reunir y cenar juntos en Nochevieja», recuerda Isabel, para quien la canción española no es que sea precisamente «para aplaudir», pero «ya que no ganamos ningún año, por lo menos este nos reiremos».

Tomando como guía las apuestas de pago de Internet, Rodolfo Chikilicuatre y su Baila el chiki chiki se situaría, de momento, en octava posición, 20 para la prensa especializada. De nuevo, Suecia y Serbia acaparan, según este sondeo, las máximas puntuaciones. Por el momento, lo único fiable es el ensayo general de ayer. Los aplausos se los llevaron Ucrania, Suecia, Portugal y la anfitriona, Serbia. España no fue muy bien acogida. Tampoco hay que lanzar las campanas al vuelo. El pasado año las encuestas situaban entre los favoritos al grupo español DNash. Y fue un fiasco.