El estreno de 'Sexo en NY' multiplica por miles los turistas en Manhattan
Miles de turistas invaden estos días la Gran Manzana atraídos por el muy esperado estreno de la película Sexo en Nueva York, mientras muchos comercios de la ciudad hacen su agosto con los ingresos que ya está dando la promoción del filme. Mientras el multitudinario estreno de la película en Londres demostró que el éxito de la serie televisiva, que finalizó hace cuatro años, ha traspasado todas las fronteras, en Nueva York el fenómeno resulta enfermizo.
Actualizado:La expectación sobre esta película, que se estrena el 30 de mayo en Nueva York , es tal, que no pasa un sólo día sin que alguno de los periódicos de la ciudad cuente alguna anécdota de sus cuatro protagonistas o especule sobre cómo acabará el filme, e incluso sobre si habrá una segunda parte.
La máquina de promoción de la película ha hecho que las caras de Carrie Bradshaw (Sarah Jessica Parker) y sus amigas Samantha (Kim Cattrall), Charlotte (Kristin Davis) y Miranda (Cynthia Nixon) estén en prácticamente todas partes, desde vallas publicitarias a paradas de autobús o portadas de revistas.
Las principales atracciones turísticas de este mes de mayo no son el Empire State Building o la estatua de la Libertad, sino la escalera de la casa de Carrie o el bar donde las chicas brindan con los cócteles Cosmopolitan.
Muchos turistas han planeado su visita a Nueva York basándose en las vidas de las protagonistas de la serie, y vienen para comprar en las mismas tiendas y visitar los mismos lugares, que se han hecho de oro gracias a la producción.
El paseo en autobús que lanzó la empresa On Location Tours en el 2001, con el que se visitan algunos de los lugares emblemáticos de la serie, ha alcanzado ya tanta fama que hay veces en las que salen hasta diez autobuses diarios.
A 42 dólares
Como muchos otros negocios de Nueva York , la compañía tiene preparado un paquete especial para el día del estreno de la película: por 130 dólares los afortunados que reservaron a tiempo disfrutarán de una proyección privada, del tour y de una fiesta en la discoteca Guest House de Manhattan. «El negocio ha crecido más del 20 por ciento desde que empezó a grabarse la película, y mucha gente vino en invierno para ver si podía ver parte del rodaje, aunque desde que se conoció la fecha del estreno no damos abasto», explicó Stacy Jacobs, guía del tour.