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El casco del quimiquero era remolcado fuera de la Bahía rumbo a los astilleros Vulcano, en Vigo. / N. R.
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Navantia entrega el último de los tres cascos quimiqueros

El último de los tres cascos quimiqueros que Navantia ha construido en sus instalaciones de Puerto Real ya navega rumbo a Vigo. Ha salido con un mes de retraso con respecto a las previsiones iniciales. La constructora naval firmó la construcción de esta obra hace más de dos años. El acuerdo era para la fabricación de dos cascos con opción a un tercero, que finalmente se consiguió. El encargo proviene del astillero gallego Vulcano que construye estos tres buques para un armador ruso, el primero de ellos se entregó en julio de 2007 y el segundo en febrero.

J. L.
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Rompehielos

La estructura que partió ayer de Matagorda tiene un peso de 7.100 toneladas - más de siete millones de kilos-. El casco tiene una eslora de 176 metros, 16 metros más que las torres de la luz, y una manga de 28 metros. El buque está catalogado como un rompehielos del tipo ICE3. Cada una de estas tres construcciones para Vulcano ha proporcionado una carga de trabajo en Navantia de 370.000 horas, 24 meses de trabajo sumando los cascos de los tres quimiqueros.

Obras

Los trabajos se ha llevado a cabo en el centro de trabajo de Puerto Real porque es el único de la empresa que puede asumir obra de tipo civil, según el plan de reconversión acordado por la UE y los sindicatos en 2004.

En cumplimiento de la normativa de navegación marítima que se encuentra en vigor desde 1992, el quimiquero que utilice esta estructura dispondrá de doble casco para evitar la posibilidad de vertido de la carga o del combustible al mar en el caso de que el barco pudiera sufrir un accidente.