Gadir Biodiésel retrasa su producción hasta que las algas que utilizará estén a pleno rendimiento
Las subidas del precio de los aceites vegetales obliga a la empresa a esperar a que el invernadero de microalgas que proyecta en Jerez empiece a funcionar Las instalaciones de la Cabezuela, que estarán en funcionamiento en un año, albergarán una planta de cogeneración que dará electricidad a la red en verano
Actualizado: GuardarLas subidas de los precios de los aceites vegetales en los mercados internacionales ha tenido consecuencias en uno de los esperados proyectos industriales que es instalarán próximamente en la Bahía. La compañía que puso la primera piedra de su centro de producción de biocarburantes en el Bajo de la Cabezuela el pasado enero -Gadir Biodiésel- anunció ayer que el inicio de la fabricación de biocombustible en esta planta se retrasará a causa de estas circunstancias.
El negocio de esta empresa es la fabricación de combustible biodiésel a partir del aceite extraído de unas determinadas microalgas, que se criarán en un parque construido al efecto en el Azud de El Portal. Esto no ha cambiado. Pero la puesta en marcha del invernadero en el que se criarán estos vegetales marinos requiere tiempo y el que su producción alcance el pleno rendimiento exige aún más. La previsión de la compañía era utilizar otros aceites -de palma, colza y soja, principalmente- hasta que la empresa hermana que produce las algas -Celulosa Investments- fuera capaz de surtir a Gadir Biodiésel de toda la materia prima que necesita para generar las 200.000 toneladas anuales de biodiésel previstas. Sin embargo, el precio de estos aceites ha obligado a cambiar estos planes y a esperar a que el parque de algas satisfaga la demanda de la planta del Bajo de la Cabezuela.
«Firme voluntad»
Fuentes de Aurantia -grupo al que pertenecen el 90% de Gadir Biodiésel y Gadir Solar, así como el 100% de Celulosa Investments- aseguraron ayer que tienen la «firme voluntad de seguir adelante con todos los proyectos anunciados, así como con las inversiones y las previsiones de creación de empleo en la Bahía». Las mismas fuentes explicaron a este periódico que aún se encuentran haciendo pruebas para determinar qué tipo de alga es la más apropiada para este proyecto -aunque todo indica que la elegida será la Nannochloropsis gaditana Lubián, aislada por el biólogo del Instituto de Ciencias del Mar de Cádiz Francisco Lubián-. Una vez que hayan concluido los estudios y la planta del Bajo de la Cabezuela esté construida empezará la producción de biodiésel y de electricidad. Esto sucederá a mediados de 2009, explicaron desde Aurantia.
Las microalgas no sólo se utilizarán para la fabricación del biocarburante, sino que su biomasa -una vez extraído el aceite- servirá para producir electricidad mediante una planta de cogeneración eléctrica que se instalará junto a la de biodiésel, según estaba proyectado. Ésta será capaz de inyectar 31 megavatios (MW) a la red de distribución de electricidad. La compañía explicó que aportarán energía en las épocas de mayor demanda como puede ser el verano, momento en el que aumenta la población de la Bahía y el consumo de los aparatos de aire acondicionado disparan las necesidades energéticas de la provincia.
Esta empresa invertirá en las cuatro factorías que pondrá en marcha en Puerto Real y Jerez -plantas de biodiésel, de cogeneración eléctrica, de microalgas y de placas solares- un total de 204,62 millones de euros. El reciente anuncio de Ebro Puleva a los representantes municipales de la paralización de las obras de construcción de la fábrica de combustible biodiésel que la Dosbio 2010 -filial de Ebro Puleva- tenía en marcha en la Jédula ha dado lugar a cierto nerviosismo en la Bahía. Sin embargo, Aurantia confirmó que los proyectos anunciados siguen adelante, aunque a lo largo de la jornada de ayer surgieron informaciones contradictorias al respecto.
jlopez@lavozdigital.es