'Apartheid' en Italia
Actualizado: Guardarl nuevo Gobierno italiano, del que forma parte la derecha más xenófoba, ha proclamado una política de mano dura con la inmigración. La policía ha practicado masivas y alarmantes redadas, con centenares de detenidos y expulsiones ilegales. El populacho, enardecido por esas declaraciones y hechos, ha asaltado, destrozado y quemado campamentos de inmigrantes, y el ministro Bossi lo ha aprobado, diciendo que «la gente hace lo que no consigue hacer la clase dirigente». Ante este gravísimo ataque a los más elementales derechos humanos, cuyos efectos amenazan difundirse a toda la UE, la misma Iglesia italiana ha reclamado que se detengan «los extremismos contra los inmigrantes». Y el Gobierno español ha cumplido con su obligación, declarando: «No compartimos la política de expulsiones sin respeto a la ley y tampoco las actuaciones que exalten la violencia, el racismo y la xenofobia». Pero, como la mejor defensa es el ataque, el Gobierno de Berlusconi ha tenido el valor añadido de pretender que ha sido España con su denuncia la que ha provocado una crisis.