DIPUTACIÓN. El Salón Regio estuvo lleno de mujeres, que representaron el extenso tejido asociativo feminista de la provincia.
Ciudadanos

Mucho calor frente a la fría realidad

Las asociaciones de mujeres de la provincia apoyaron a la ministra en un encuentro multitudinario en el que también exigieron medidas concretas

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La ministra de Igualdad contaba con un público entregado en su primer encuentro con el tejido asociativo femenino de la provincia. En un abarrotado Salón Regio de Diputación y acompañada por la consejera de Igualdad, Micaela Navarro, y por la diputada de Igualdad, Margarita Ledo, Bibiana Aido se mostró atenta a las peticiones de las asociaciones. Habló poco y escuchó más, aunque antes de dar paso al turno de peticiones expresó su deseo de que el movimiento asociativo participe «como interlocutor directo en las decisiones de este Gobierno». No en vano Cádiz es una de las provincias más activas en cuanto asociacionismo. En los límites gaditanos se mueven 213 asociaciones de mujeres.

Pero las representantes de esta asociacones llevaban bien preparadas sus exigencias a una ministra a la que le mostraron «todo el apoyo». Entre las reclamaciones destacó la de la presidenta de la Asociación de Mujeres Progresistas Victoria Kent, Maribel García, quien aseguró que las órdenes de alejamiento son «papel mojado», por lo que reclamó el uso de las pulseras para controlar los movimientos de los agresores, «como se hace en Madrid». La presidenta de la Federación de Mujeres Sol Rural, Francisca Gago, pidió «espacios en los pueblos para que podamos reunirnos. Queremos que se cree la figura de la Casa de la Mujer». Igualdad en las pensiones para las viudas, prevención como el mejor instrumento para luchar contra la violencia o una visita al juzgado de Chiclana, por parte de una funcionaria, «para que vea en qué condiciones atendemos a las víctimas de violencia», estuvieron entre las muchas peticiones a la ministra de Igualdad.