Los Dioses están con nosotros

El Castellón viste como una cebra. Esta tarde no sé, pero en casa descarado que sí. Y nosotros como buenos caballos vamos a darles por el hocico. Ellos vienen con unas ínfimas posibilidades de meter la cabeza entre los tres primeros, algo que realmente no se creen ni ellos mismos. Así que lo mejor es que se dejen de chuminás y pamplinas varias y no vayan a venir a Chapín a enmendar La Plana, que de Plana saben estos un montón.

El Xerez CD debe vaciarse como una galera. Tintes dramáticos dan color a una contienda dónde si perdemos o empatamos, la Venta del Nabo tendrá una mesa reservada para los de Esteban Vigo Mortenssen, o como se escriba. El abaratamiento de entradas y la necesidad de cariño que el equipo azulino tiene en estos momentos tan cruciales provocarán que las gradas de Chapín puedan registrar el mejor aspecto de la temporada. Y miedo me da, porque cada vez que los feligreses azulinos acuden en cantidades industriales a al estadio de la Avenida de Chiribitos, el hostiazo es de campeonato. Pero para eso están las estadísticas, para romperlas, como las aguas cuando una mujer pare.

Dani Pendín es nuestro líder. El pibe visita de nuevo Chapín y sé de buena tinta (la de un calamar de tres kilos y medio) que le duele desaforadamente la situación de su Xerez CD. Dani, un autogol no estaría anda mal. Ahora que nadie nos escucha ni nadie se va a enterar, métela en tu portería en un córner, que a ustedes es más difícil meterle un gol que comerse un plato de spaghetti con tomate sin echarse un lamparón en la camiseta, blanca para más inri. Pepe Murcia salió escaldado de Chapín, así que al cordobes no le voy a pedir nada por miedo a reprimendas. A ver si se mosquea más todavía y hace que sus hordas nos meneen las cachas.

Hay que ganar tres de cinco partidos. Esta tarde hay que dejar el tema en que hay que ganar dos de cuatro. Señal de que le hemos dado en todo el boquino al equipo del levante español. Estoy escribiendo estas líneas un montón de presionado porque ayer por la mañana no pude escribirlas y tuve que empezar a hacerlo a las diez de la noche, hora en la que llegué al kelo de Sevilla. Salva Galván, jefe de deportes de LA VOZ, estaría acordándose de mis ancestros y con un mosqueo de mil demonios. Tranquilo Salva, que esto llega a la redacción aunque sea tarde. Mejor tarde que nunca.

Después de este impass para explicar lo que me ocurrió ayer sólo me resta obligar a los pupilos de Boquerón a hacer morder el polvo a los de Pepe Murcia. Se nos va la vida una vez más y los cirujanos que tienen en sus manos salvarla son nuestros jugadores. Por favor, no dejad que la maquinita esta del pulso haga piiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii. Hay que operar a corazón abierto a un paciente que si la operación sale bien, con dos goteritos más, conseguirá ponerse bien y que los médicos le den el alta, el alta en Segunda División un año más.

Yordi tiene enfrente hoy al portero menos goleado de la categoría. Tiene su morbo que el pichichi bata al Zamora. Así que Yordi, amigo mío, aplícate el cuento y que el domingo salga en los periódicos tu explicación de lo chulo y guay que es batir al guardamallas menos goleado de la categoría.

Señoras, señores, nos vemos esta tarde en Chapín. Recen lo que sepan. Animen sin parar. Desgañítense. Hagan presión. Chapín debe ser una caldera, un fortín, un lugar hostil para el rival. Entre todos podemos sacar esto adelante. Atrás queda el varapalo de Córdoba. Si ganamos salimos, Si ganamos seguimos vivos y coleantes. Si ganamos me emborracho. Si ganamos se multiplican nuestras posibilidades de quedar por encima de cuatro equipos en la clasificación. Alea iacta est. A por ellos. FORZA XEREZ.