Julio, otro baluarte
Como cada año, hace ya algunas fechas, ha sido otorgado el premio del Baluarte del Carnaval. Este año, el honor y los «euritos» les han sido otorgados a Julio Pardo Merelo. Como buen aficionado, sobre todo a esta modalidad, he seguido la trayectoria de Julio desde sus comienzos: primero como competidor (unos pocos años), después como simple seguidor y desde hace algún tiempo como analista en Punto Radio. Desde aquellos «bisoños tunantes» Aspirinos hasta estos últimos frailes del Coro de la Catedral, ha seguido fiel a sus principios y ha mantenido una línea ascendente de éxitos difícil de superar. Ha competido con grupos de los más diversos: primero contra los coros de Los Dedócratas, luego contra La Viña, el coro Mixto, el de los niños y actualmente contra el de Kiko y, a la larga, su coro sigue en la brecha aupado siempre entre los favoritos del concurso cada año.
Actualizado:Mantiene desde hace mucho tiempo un grupo compacto de componentes que ha ido mejorando con «buenos fichajes» y está consolidado como uno de los «punteros» de nuestro Carnaval.
Se podrá discutir su estilo o sus innovaciones, pero de lo que no hay duda es de que actualmente el equipo Julio Pardo-Antonio Rivas-Juan Lucena funciona. Cada año lo demuestran en las tablas del Gran Teatro Falla y luego en las calles de la ciudad. Nunca han escatimado esfuerzos en mejorar su puesta en escena aportando cosas a la modernización de una modalidad que, gracias a la competitividad, mejora año tras año.
Bajo mi modesto punto de vista la decisión del jurado es de lo más acertada pues Julio y su grupo se han convertido en un gran Baluarte de nuestros Carnavales por derecho propio. Mi felicitación no sólo para él, que sin duda la merece, sino para todos los que durante estos años lo han acompañado en su aventura carnavalesca y también para Manoli, su fiel seguidora.