TERROR. Uno de los heridos es depositado en una mesa de un comercio de Jaipur. / AP
MUNDO

Seis atentados coordinados matan a 60 personas en la ciudad india de Jaipur

El Gobierno asegura que los ataques iban dirigidos contra los hindúes y los atribuye a un grupo islámico

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Seis atentados coordinados con explosivos causaron ayer alrededor de sesenta muertos en la ciudad turística india de Jaipur, en el noroeste del país asiático, según confirmó Vasundhara Raje, primer ministro de Rajasthan, estado del que la urbe es capital. La misma fuente cifró el número de heridos en cerca de 150. Otros dos artefactos fueron desactivados por los cuerpos de seguridad antes de que fueran detonados.

Una de las bombas estalló en Tripolia, cerca de un templo hindú dedicado al dios-mono Hanumanque, que en ese momento congregaba a un nutrido grupo de devotos, por lo que las primeras hi- pótesis apuntan hacia que los ataques se dirigían contra esta comunidad religiosa. Fuentes del Ministerio del Interior incluso atribuyeron el atentado al grupo islá- mico Harkut-ul-Jehadi Islami, con base en la vecina Bangladesh. El secretario de Información rajasthaní, Rohit Singh, añadió que es posible que las acciones terroristas pretendieran instigar odios entre musulmanes e hindúes, dos comunidades que comparten vida y negocios en Jaipur, ciudad que no había sufrido ningún acto violento en los últimos diez años.

Además, las deflagraciones, de media o baja potencia según fuentes policiales, tuvieron como objetivos varios mercados y zonas históricas y amuralladas de un casco urbano lleno de palacios y construcciones antiguas que atrae a cientos de miles de turistas cada año. Anoche, todavía no había noticias sobre la presencia de extranjeros entre las víctimas, aunque no se descartaba esta posibilidad. Jaipur forma parte del conocido 'triángulo dorado' junto a la capital del país, Delhi, y la ciudad de Agra, hogar del mausoleo Taj Mahal, la principal atracción turística de India.

Puntos muy escogidos

Fuentes de Inteligencia destacaron a la cadena de televisión de Delhi NDTV que se trataba de atentados meticulosamente planeados, con puntos muy bien escogidos para causar el máximo daño posible. El primer artefacto estalló hacia las 19.00 horas -15.30 horas en España- y abrió una cadena de detonaciones que se sucedieron por espacio de media hora en lugares muy conocidos de la llamada 'Ciudad Rosa', como el Palacio de los Vientos, la puerta de Sangeneri y los bazares de Johari y Tripolia. En uno de los ataques se utilizó un coche bomba y en otro se depositó una bolsa con explosivos en un comercio. La Policía cree que el resto de los artefactos fueron colocados en 'rickshaws', los populares triciclos indios.

Las detonaciones provocaron una estampida entre la multitud que abarrotaba la zona. La gente, aterrorizada, intentó huir del casco histórico, pero el atasco que soportaba a esa hora por el tráfico con lugareños y turistas que hacían sus compras en sus calles pobladas de bazares provocó una situación de caos. Testigos presenciales describieron a las televisiones locales escenarios dantescos, con numerosos cadáveres y cientos de bicicletas y otros vehículos destrozados en medio de un mar de zapatos sin dueño y grandes charcos de de sangre.

El primer ministro indio, Manmohan Singh, y la presidenta, Pratibha Patil, condenaron de inmediato el atentado. Singh llamó a la calma a la población india, con especial hincapié en que nadie se dejara llevar por las venganzas, y garantizó la ayuda del Gobierno central a las autoridades de Rajasthan y a las familias afectadas.