DESPLAZAMIENTO. Los azulinos salieron ayer a las cinco de la tarde rumbo a tierras cordobesas. / TAMARA SÁNCHEZ
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A por la décima

El Xerez podría dejar el descenso si supera las nueve jornadas que acumula sin perder y sentenciaría a un Córdoba que lleva otros tantos partidos sin ganar

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El drama puede ser importante esta tarde en el Nuevo Arcángel. Por trágico que se pinte, esa es la intención de un Xerez Deportivo que tratará de sentenciar al Córdoba para salir definitivamente de los puestos de descenso. Los azulinos quieren soltar esa agonía que les ha entristecido toda la temporada y plantársela a un Córdoba que podría quedar con pie y medio en Segunda División B. Y es que ni siquiera por tierras cordobesas confían demasiado en la salvación de un equipo que está inmerso en una crisis galopante por culpa de nueve jornadas sin conocer la victoria. Todo lo contrario que un Xerez triunfal que está a sólo tres paso, a sólo una zancada, a una victoria de dejar las arenas movedizas por las que ha vagado durante los últimos meses. En otras tardes, los de Esteban han podido dejar la zona de descenso pero dependían de otros resultados. Esta tarde no, en esta jornada el enfrentamiento directo entre el Alavés y el Albacete permitirá al Deportivo asegurar su salida del pozo si vencen en el Nuevo Arcángel. Lo podrán hacer gracias a esa magnífica racha de resultados que les está permitiendo escalar desde el más profundo suelo de Segunda División. Y es que de ganar o empatar los de Esteban lograrían superar varios records. Por ejemplo, se convertirían en el equipo de la categoría de plata del fútbol español que acumularía más encuentros sin perder durante esta temporada.

Para superar este baremo tendrán que darle la puntilla al Córdoba. Los de José González ven en el duelo ante los azulinos la penúltima final de la campaña. Es cierto que su descenso no se haría matemático de no ganar a los de Esteban, pero una derrota les haría entrar en un estado vegetal. Moralmente tendrían los dos pies y la cabeza en Segunda B y la crispación cordobesista podría terminar de estallar. El colmo del Córdoba es que cuenta con importantes bajas tanto en cantidad como en calidad. El técnico gaditano se ha quedado sin cuatro de sus titulares y ha tenido que tirar del filial para completar la convocatoria. Unos por lesión, otro por sanción y otros porque prácticamente se han borrado de este trascendental duelo, han dejado a este moribundo arrinconado para que el Xerez le dé la puntilla. Al menos, con esa intención es con la que viajó la expedición xerecista, con la de dar ese golpe definitivo lejos de Chapín que les catapulte y les saque del infierno que han vivido desde aquel derbi en Carranza en el que entraron en descenso.

Percance

Esteban deberá salvar el percance de última hora que le generó la lesión de Adrián Martín. El canario iba a continuar en el once titular, pero sus molestias en el sóleo dejan hueco para Carlos Calvo o incluso para Marco Navas.

Además, las dolencias de Adrián han permitido que Miki Roqué vuelve, de momento, a una convocatoria. El preparador malagueño se ha llevado a todos los futbolistas disponibles y no será hasta la charla previa al encuentro cuando Esteban realice un descarte y dé la alineación definitiva que jugará en el Nuevo Arcángel. De recuperarse Adrián, Miki se volvería a quedar fuera, y salvo la duda del canario pocas más quedan en el once. Francis y Luque se sentarán en la sala de mandos, Redondo regresará al lateral derecho y dejen de contar. Todos los demás repetirán y tratarán de darle la puntilla a un moribundo Córdoba.

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