Jerez

«En Jerez recibimos a todo el mundo en la Feria con cariño y soniquete del corazón» El guitarrista jerezano ha dejado a un lado sus compromisos profesionales estos días para disfrutar en el Real

Los flamencos se sienten muy a gusto en la Feria del Caballo y Juan Diego no iba a ser menos. El guitarrista jerezano, fenomenal solista y no menos bueno acompañando, fue sorprendido por mí en una reunión de amigos y tras unos cantecitos y unas pataítas por bulerías, lo saqué de la fiesta cinco minutitos y me contó en primera persona su manera de vivir y entender una fiesta tan especial como la Feria del Caballo.

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- La guitarra es parte primordial de la Feria. Dan ganas de coger una y empezar a sacarle notas, ¿no, Juan Diego?

- La Feria de Jerez quita toas las penas del sentío. Con los colores que hay, el ambiente que hay y la felicidad que se respira, la inspiración es fácil que llegue y es para coger una guitarra y empezar a tocar y no parar y transmitir esos sentimientos mediante las cuerdas de la sonanta.

- ¿Tienes trabajito durante la Feria del Caballo?

- Esta Feria la estoy viviendo y no he aceptado ofertas que había por ahí de trabajo. He decidido tener tiempo libre estos días para poder darme mi vueltecita por el Real y disfrutar con una copa de vino de la tierra en la mano.

- ¿De día o de noche en la Feria?

- Tengo un niño con seis añitos y otro con uno y entonces es más factible venirse para el González Hontoria a la luz del día, mejor que de noche.

- ¿Has llevado ya a los cacharritos a los niños como buen padre?

- Una mijita de caros si que están los cacharritos y dan muy pocas vueltas (risas) Mi niño me decía el otro día, Papi que poquito dura esto, ¿ya no da más vueltas? Si da mas vueltas estaría mejor. No se corresponde el precio con la duración (más risas)

- ¿Cuál es el día ideal para desconectar de todo y venirse a disfrutar a la Feria?

- El día bueno es hoy, el que te coja en la Feria. Y mañana también va a ser bueno. En la Feria cualquier día es maravilloso si estás rodeado de los tuyos. El ambiente es de total exaltación de la amistad y de alegría.

- Una vez que se está dentro del Recinto Ferial, cuesta tener que irse para casa, ¿verdad?

- Aquí se sabe cuando se entra pero no se sabe cuando se sale. Es que uno no encuentra la puerta. Las salidas no vienen en los planos, no se ve ni el plano. Lo mejor es perder el plano y así te olvidas de la salida.

- Como el flamenco, la Feria de Jerez cada vez gusta a más gente ¿no?

- La gente de Jerez somos especialistas en acoger a todo el que viene de fuera y aquí en la Feria somos unos anfitriones maravillosos. Lo damos todo, cariño y soniquete, pero no soniquete de ritmo, sino soniquete de nuestro corazón.