Impúdico

a implicación del actor Andrés Pajares en sucesivos incidentes en los últimos días, que le han costado una orden judicial de alejamiento y la apertura de diligencias por un delito de amenazas, ha situado al cómico en el foco de una prensa que ha presentado los hechos de manera muy dispar. Junto al tratamiento puramente informativo de la mayoría de los medios, otros espacios han relatado la triste peripecia de Pajares con un tono morboso y afirmaciones ofensivas que degradan más a quienes utilizan tan equivocadamente la libertad de expresión que al propio personaje. Porque ni la comparencia de sus allegados en las televisiones para revelar detalles escabrosos sobre su privacidad, ni la escandalosa exposición pública de Pajares justifican la desconsideración periodística hacia quien está atravesando por un trance personal tan delicado, agravado por su exhibición impúdica en los medios.