MAR DEL ESTE. Maniobras de submarinos. / REUTERS
MUNDO

China amenaza la hegemonía militar de Estados Unidos en el océano Pacífico

El régimen de Pekín construye una base de submarinos nucleares en una isla estratégica

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Espoleada por su extraordinario crecimiento económico de los últimos años, China se prepara para mostrar su hegemonía militar en Asia y el Pacífico, donde Estados Unidos aún cuenta con un amplio despliegue de tropas para apoyar a sus aliados tradicionales: Japón, Taiwán y Corea del Sur. Para hacer frente a dicha supremacía, el régimen comunista de Pekín construye en la isla de Hainan, al sur del país, una gran base de submarinos nucleares que amenaza con cambiar los equilibrios de poder en la región. Así lo ha desvelado la prestigiosa revista de defensa 'Jane's Intelligence Review, que ha publicado las primeras imágenes de las instalaciones tomadas vía satélite.

Aunque expertos militares asiáticos ya habían alertado sobre la existencia de la base en 2002, es la primera vez que se tiene constancia de la misma a través de las fotografías suministradas por DigitalGlobe. En las imágenes se pueden ver las dársenas del puerto y un submarino nuclear del tipo 094, así como tres destructores Luyang y una fragata Jiangwei. Otra fotografía muestra los trabajos de construcción de la base, que se supone que tiene hasta once túneles excavados en la montaña a los que se accede a través de unas entradas de dieciocho metros de altura.

Unas dimensiones que han llevado al diario británico The Daily Telegraph a definir el recinto militar como «una gigantesca base secreta a lo James Bond que podría ocultar unos veinte submarinos nucleares con el fin de proyectar el poder de China en la región».

Sesenta mil barcos

Al margen de tales comparaciones, esta nueva instalación china, a la que llegó su primer submarino atómico en diciembre de 2007 y podría albergar también portaaviones, va a traer cola por su estratégica ubicación en el Mar de la China Meridional y su cercanía a Taiwán, Japón, Filipinas, Vietnam, Tailandia, Indonesia o el estrecho de Malaca. Por este canal de más de novecientos kilómetros de largo y entre cincuenta y cien kilómetros de ancho, que comunica el océano Índico con el mar de la China Oriental y el nordeste de Asia, pasan cada año unos 60.000 barcos que transportan la mitad del petróleo que se consume en el planeta y un tercio del comercio mundial.

«Tanto para las potencias regionales como externas, será difícil ignorar que China construye ahora una gran base naval en Sanya y puede estar preparándose para albergar y proteger aquí buena parte de sus fuerzas nucleares o incluso operar con ellas desde este lugar», señaló el artículo de Jane's Intelligence Review.

Poco antes de que se divulgara esta noticia, el jefe de la CIA, Michael Hayden, había advertido de que el ascenso militar de China es «problemático» para Estados Unidos por sus intenciones sobre Taiwán. No en vano, Pekín reclama la soberanía sobre la isla, que permanece separada del régimen comunista desde el final de la Guerra Civil en 1949 y a la que Washington está obligada por ley a ayudar en caso de conflicto.