Opinion

Explicaciones

La crisis desatada acerca del aceite de girasol, porque presuntamente unas partidas de dicho producto, importadas, han sido detectadas con cierta mezcla de hidrocarburos debido ha que su transporte ha sido efectuado en recipientes sin previo lavado, ha dejado patente que la gestión de este tipo de cuestiones ha estado muy por debajo de lo que de un Gobierno se espera que realice.

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El alarmismo que desde un primer momento se ha creado con la total prohibición del aceite es un motivo más de preocupación, puesto que hace algún tiempo en nuestro país tuvimos una desagradable experiencia con aceites de colza, con consecuencias dramáticas para algunas personas. Con este precedente, anunciar la total prohibición del consumo del aceite de girasol y en menos de un día levantar la medida no parece que otorgue credibilidad a un Gobierno que tiene la responsabilidad de velar por los intereses de todos y en un grado mayor por la salud. Por lo tanto, el principal responsable del Ministerio de Sanidad, señor Soria, deberá dar explicaciones a todos, sin bromas y con la suficiente consistencia que de un ministro cabe esperar.