Garzón encarcela a la alcaldesa de Mondragón por colaborar con ETA
Considera que Galparsoro ha violado de forma «reiterada, expresa y notoria» la suspensión de actividades de ANV y se ha plegado a la estrategia de la banda
Actualizado:Inocencia Galparsoro, alcaldesa de Mondragón (Guipúzcoa) y dirigente de Acción Nacionalista Vasca (ANV), ingresó ayer en la madrileña cárcel de Soto del Real por orden del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.
El magistrado le imputa los delitos de colaboración con ETA y quebrantamiento de medidas cautelares, por entender que, en «clara sumisión» a la estrategia marcada por la banda terrorista, ha violado «de forma reiterada» la orden de suspensión de actividades de este partido dictada el pasado 8 de febrero.
La medida se toma dentro del sumario contra el presunto frente institucional de ETA, que estaría compuesto por la Mesa Nacional elegida en 2006 en la clandestinidad y sustentado por la colaboración de las direcciones de los partidos suspendidos en febrero: ANV y el Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV).
Garzón, de acuerdo con la Fiscalía y las acusaciones, argumenta que es preciso tomar esta drástica medida cautelar (prisión incondicional) ante la gravedad de los delitos de terrorismo de que se le acusa, ante la reiteración de los hechos delictivos, y por la posibilidad de que utilice su puesto privilegiado de alcaldesa para destruir elementos de prueba.
De hecho, el magistrado aprovechó las cinco horas que Galparsoro pasó en un calabozo de la Audiencia Nacional para ordenar a la policía un registro del Ayuntamiento de Mondragón, de donde se llevaron las actas y resoluciones de todos los plenos celebrados desde la suspensión de actividades, que van a constituirse en pruebas contra la alcaldesa.
El auto de Garzón, de once folios, adelanta que el juez analiza en este momento si en los próximos días debe citar también como imputados en la Audiencia Nacional a la alcaldesa de Hernani (Guipúzcoa), Marian Beitialarrangoitia, y al alcalde de Igorre (Vizcaya), ambos de ANV, que, el 23 de abril, comparecieron en San Sebastián, junto a Galparsoro, en uno de los actos públicos en los que violó la suspensión de actividades de este partido.
El magistrado también utiliza el documento para lanzar un aviso a todos los cargos públicos del País Vasco y Navarra elegidos en las siglas de ANV. Les advierte que el auto de suspensión de actividades de este partido les prohíbe de manera expresa actuar en el ámbito municipal, dentro o fuera del ayuntamiento, bajo la denominación de ANV o cualquier otra que la sustituya. «Solo pueden actuar a título individual y personal», aclara. En caso contrario, se arriesgan a seguir el mismo camino que la alcaldesa de Mondragón.
Boicot a las elecciones
Garzón acusa a Galparsoro de dos cosas concretas. En primer lugar, de haber realizado «una actividad intensa» para relanzar la estrategia impulsada en 2008 por ETA y Batasuna de burla de las ilegalizaciones, que tuvo su expresión más clara en la campaña de abstención y boicot a las elecciones de marzo pasado, una vez quedaron excluidas las listas de ANV. En este sentido, indica que Galparsoro acató «de forma mimética» las órdenes de ETA y participó con los principales líderes de ANV en esta campaña, tras cambiar su postura inicial de voto nulo. Lo hizo en el acto de dirigentes de ANV del 21 de febrero en Pamplona y en la convocatoria, el 4 de marzo, de dos jornadas de movilización a favor de la abstención.
En segundo lugar, incumplió, «de forma abierta, expresa y notoria», la suspensión de actividades. En opinión del juez, lo hizo el 23 de abril, en San Sebastián, cuando los responsables de ANV se rebautizaron en público con el término «electos independentistas», en lo que considera «un fraude» para burlar la suspensión. En esa rueda de prensa, alcaldes de ANV de numerosas localidades anunciaron que se opondrían a las «mociones éticas» del PSOE, en las que se pretendía la condena unánime del asesinato por ETA de Elías Carrasco. Garzón dice que ese acto colectivo es una muestra de una decisión «orgánica», tomada por la dirección de ANV, y por lo tanto un acto ilícito.
El magistrado indica que Galparsoro volvió a violar la suspensión al día siguiente, cuando el ayuntamiento de Mondragón debatió la moción del PSOE. La alcaldesa presentó una moción alternativa firmada por el grupo municipal de ANV, lo que está prohibido.
36 encarcelados
Con la alcaldesa de Mondragón ya son 36 los presuntos dirigentes del frente institucional de ETA encarcelados por Garzón desde septiembre pasado, 35 de ellos pertenecientes a la nueva y clandestina Mesa Nacional de Batasuna. El sumario cuenta con casi 50 imputados, entre ellos parte de las direcciones de ANV y PCTV.
Galparsoro llegó a la Audiencia Nacional poco antes de las diez de la mañana, a pie y acompañada por su abogado Iñigo Iruin y por una veintena de miembros de ANV, entre ellos su presidente, Kepa Bereziartua, que la despidieron en la puerta con aplausos y gritos de ánimo. El juez no inició el interrogatorio hasta las doce del mediodía, pero lo interrumpió pocos minutos después para leer el informe que le trajo la Policía Nacional, en el que le daba cuenta de todas las actuaciones llevadas a cabo por la alcaldesa de ANV desde el momento en que se decreto la suspensión de actividades del partido.