
Moratinos elude hablar del pago de un rescate porque «salvar a los españoles no tiene precio»
La Audiencia Nacional abre diligencias para investigar el secuestro del 'Playa de Bakio'
MADRID Actualizado: GuardarEl ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, Miguel Angel Moratinos, ha afirmado no disponer de una estimación del coste que ha tenido el despliegue diplomático y de las Fuerzas Armadas de España para liberar el atunero 'Playa de Bakio' porque "salvar a los españoles no tiene precio".
Moratinos ha asegurado que "lo más importante" en el caso del atunero vasco secuestrado por piratas somalíes fue liberar "con seguridad" a la tripulación española del barco. "Salvar a los españoles" y "garantizar el regreso a sus casas no tiene precio", ha manifestado Moratinos, quien ha remarcado que es al Gobierno a quien corresponde garantizar esto.
Una vez terminada la crisis, Moratinos se ha mostrado dispuesto a comparecer en el Congreso para dar explicaciones sobre las gestiones realizadas por el Ejecutivo para liberar el 'Playa de Bakio' y ha confirmado que pidió a los grupos políticos que solicitaron su comparecencia que aceptaran que ésta tuviera lugar cuando la situación se hubiera resuelto.
"El Gobierno no tiene ninguna dificultad en aportar todos los datos para expresar sobre todo la satisfacción de que es un caso que se ha resuelto de forma positiva para los intereses españoles y, sobre todo, para los pescadores españoles que sufrieron el secuestro durante casi una semana", ha señalado.
Aunque el Gobierno ha eludido pronunciarse sobre si hubo pago a los piratas, del mismo modo que han hecho los familiares de los secuestrados, sin embargo, una organización de asistencia marina con sede en Kenia ha confirmado que se pagó un rescate de 750.000 euros.
La Justicia investigará el secuestro
Mientras, los tripulantes del atunero vasco 'Playa de Bakio', liberados el sábado tras una semana en poder de piratas somalíes, siguen su viaje rumbo a las islas Seychelles tras navegar 1.600 kilómetros desde la costa oriental africana y vivir un infierno difícil de olvidar. Desde allí serán repatriados a España el próximo miércoles. También sigue su curso la investigación del secuestro después de que el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu haya abierto diligencias previas.
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional, que se encontraba de guardia la semana pasada, abrió las diligencias el sábado después de que durante toda la semana la Policía estuviera informándole de la situación del buque, según fuentes jurídicas.
Este delito de piratería es competencia de la Audiencia Nacional, tal y como establece el artículo 23 de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Para el desarrollo de la investigación, el magistrado citará a declarar a la tripulación del barco así como al armador del mismo en calidad de testigos. Sin embargo, las citaciones se producirán pasado un tiempo produdencial ya que ahora mismo "la prioridad es que descansen y se recuperen".
También se investigará el pago de un supesto rescate con el que se podría haber logrado la liberación de los tripulantes.
Reunión de los Veintisiete sobre la piratería
A petición de España, los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea mantendrán mañana "un debate" en Luxemburgo sobre el problema que representa la piratería en el Océano Indico.
La delegación española, encabezada por el nuevo secretario de Estado para Asuntos Europeos, Diego López Garrido, explicará al resto de ministros "qué ha ocurrido y su opinión" sobre el secuestro del atunero vasco. Fuentes de la Presidencia eslovena confían en que el encuentro sirva de "plataforma para que los ministros aborden el problema" de la piratería en alta mar, a la espera de que "el debate produzca orientaciones útiles para acciones futuras" que atajen este problema.
La Unión Europea condenó el secuestro del atunero vasco el lunes pasado, un día después de que trascendiera la noticia. Entonces lamentó que este tipo de incidentes "constituyen un obstáculo grave a los esfuerzos europeos para contribuir a la estabilidad de Somalia", sin Gobierno efectivo desde 1991, al considerar que afecta también a la entrega de la asistencia humanitaria al país e impide relaciones normales entre Somalia y el resto del mundo.
Al margen de esto, Francia, Estados Unidos y Reino Unido preparan ya un borrador de resolución para que lo adopte el Consejo de Seguridad de la ONU con el objetivo de que el organismo de seguridad internacional autorice a los países a luchar contra la piratería tanto en Somalia como en cualquier otro sitio.